PSOE e IU acusan al gobierno central de propiciar el fin del sector mientras el PP asegura que sin ellos no habría minería
28 may 2016 . Actualizado a las 17:55 h.A falta de pocos días para que se abra oficialmente la campaña electoral, varios de los principales candidatos asturianos llevaron el carbón a la arena política. PP, PSOE e Izquierda Unida se cruzaron acusaciones respecto al apoyo de cada grupo al sector minero y también sobre las actuaciones pasadas y el futuro a largo plazo de las explotaciones asturianas.
La cabeza de lista del PSOE al Congreso por Asturias, Adriana Lastra, aseguró que el PP ha certificado el cierre de la minería española en 2018 «de espaldas a los sindicatos, los partidos políticos y la patronal». Lastra se refería así a la autorización dada por la Comisión Europea (CE) para la concesión de una ayuda pública de 2.130 millones de euros para contrarrestar el impacto social y económico del cierre de 26 minas de carbón en España.
La candidata y secretaria de Política Municipal del PSOE participó junto con el candidato al senado y expresidente del Principado Vicente Álvarez Areces, en el reparto de propaganda electoral en Gijón. En declaraciones a la prensa, Lastra ha advertido de que los únicos que pueden asegurar un cambio son los socialistas y que por lo tanto nadie debe buscar intermediarios para que haya un cambio de Gobierno.
Areces, por su parte, ha incidido en que Asturias necesita un cambio de gobierno tras cuatro años nefastos de Gobierno del PP en los que, según ha afirmado, se ha producido una regresión en los derechos ciudadanos y en la calidad de vida. En su opinión, Asturias necesita un cambio que permita que el AVE entre en Asturias y que funcionen las grandes infraestructuras que permitan avanzar hacia la modernidad, como el puerto de El Musel o la regasificadora. Sobre esta última, ha señalado que es un elemento básico en el plan energético «y forma parte de una red de siete regasificadoras que tiene plena vigencia para que España se convierta en uno de los grandes distribuidores para Europa». «La regasificadora es un elemento de futuro para España y Asturias», ha precisado tras señalar que los problemas y anulaciones temporales ya han sido corregidos.
Minería gracias al PP
Por su parte, la cabeza de lista al Congreso de la coalición PP-Foro, Susana López Ares aseguró que su partido había sido el principalñ defensor de la minería por haber contemplado que su actividad se prolongue más allá del año 2018. «Si hoy existe actividad minera en Asturias y en España es gracias al PP que salvó al sector de la minería cuando el PSOE había aceptado su cierre en 2014», ha señalado la candidata popular, que ha advertido que su partido ha conseguido además la autorización de la UE para dotar con 2.100 millones de euros a los fondos mineros. López Ares cargó contra el candidato socialista, Pedro Sánchez, a quien culpó de no haber permitido que en España haya hoy en día un gobierno estable del PP y PSOE que podría estar ya trabajando por el futuro de Asturias y de España.
Carbón de sangre
Una visión totalmente opuesta fue la del coordinador general de IU Asturias, número 3 en la lista conjunta de Unidos Podemos, Manuel González Orviz, quien acusó a los populares de tener una especial «inquina» a la minería, además de calificar de inaceptable el nuevo plan del sector que, a su juicio, supondrá su liquidación. «Es simplemente inaceptable que el Gobierno, que no se puede olvidar que está en funciones, presente de espaldas a los sindicatos, a la patronal y al resto de las fuerzas políticas democráticamente elegidas, que representan a la ciudadanía, un plan letal para un sector estratégico, como es el sector energético, para todas las comarcas mineras por el impacto que tiene en la economía de estas zonas».
Orviz recordó que países como Alemania reabren minas por considerarlas puntos estratégicos de sus planes nacionales de energía, y apuntó que IU comparte «plenamente» la visión de los sindicatos mineros de que el plan vigente supondrá el fin de la minería. «El carbón, nos guste o no, se va a seguir quemando, pero, lamentablemente se va a seguir quemando carbón proveniente de otras latitudes, carbón con un amplio dumping social, manchado de sangre, importado de países como Colombia y otros países donde no hay respeto a los desechos laborales, ni siquiera a los más básicos derechos humanos», señaló Orviz.