El sindicato asegura que menos del 1% de las familias han secundado la protesta y que la confederación de padres ha cosechado «un duro correctivo»
03 dic 2016 . Actualizado a las 21:23 h.La huelga de deberes ha centrado las conversaciones de las familias con niños en edad escolar durante las últimas semanas. Partidarios y detractores de liberar la carga de trabajo de los alumnos han cruzado argumentos y reproches con el objetivo de defender sus tesis. Sin embargo, en la práctica no ha habido debate y la protesta ha sido un rotundo fracaso, o al menos o así lo aseguran desde el sindicato ANPE- Asturias, que afirman que el seguimiento ha sido inferior 1%.
Desde el sindicato se muestran críticos con la campaña iniciada por los padres y rotundos en sus conclusiones, ya que sostienen que ha quedado de manifiesto «el irrelevante seguimiento de la huelga de deberes, inferior al 1%», convocada por una confederación de padres «que ha cosechado un duro correctivo de sus propias filas». Por ello, ANPE-Asturias ha agradecido a las familias su confianza «en los criterios técnico-profesionales y las decisiones de los docentes» a la hora de establecer tareas escolares, así como su respeto «a la autonomía pedagógica y organizativa de los centros educativos».
Esta convocatoria, que se había hecho extensiva a la sociedad, ha coincidido además, según ANPE, con otra campaña publicitaria comercial que también cuestiona la labor del profesorado. El sindicato argumenta que se ha quedado solo en la defensa del profesorado, frente al resto de OOSS que integran la JPD de Asturias, que «no han considerado procedente debatir sobre este tema, dejando a su suerte al profesorado al que dicen representar, temerosos de confrontar con las asociaciones de padres».
El sindicato aplaude el papel de los padres y también agradece la labor del Consejero de Educación, Genaro Alonso, de quien destacan «su inestimable apoyo». Asimismo, ensalzan su «valentía política y la clarividencia» al calificar de «injusto y peligroso la insumisión a los deberes» y que «esa rebelión supone una afrenta y un desafío a la autonomía pedagógica de los centros y a la autoridad de todo el profesorado», además de un incumplimiento flagrante de la normativa vigente, añaden desde Anpe..
Rendimiento académico
Para ANPE-Asturias la huelga de deberes es una «actitud irresponsable» que perjudica al rendimiento académico del alumno y que «socava la autoridad del profesorado y la relación profesor-alumno». Por ello, defienden la importancia del diálogo y la necesaria implicación y cooperación entre el centro docente y la familia para la mejora de la educación de nuestros alumnos y su rendimiento escolar. También apuestan por la «racionalidad y la adecuación de las tareas escolares, pero desde el respeto al docente y a los indudables beneficios de dichas tareas». Los objetivos de los deberes deben ser «afianzar lo aprendido en el aula, inculcar hábito de estudio, fomentar el esfuerzo personal e incluso la organización y planificación del trabajo del alumno».