La totalidad de la ejecutiva de Avilés y los responsables de la central en Hunosa, Carrio y Nicolasa dejan sus cargos
18 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Discrepancias en el modelo organizativo de la Corriente Sindical de Izquierda (CSI). La totalidad de la ejecutiva de Avilés ha presentado su dimisión por desavenencias con la dirección regional, renuncias que se suman a las de los responsables de la formación en Hunosa, Carrio y Nicolasa, que critican las «injerencias» del secretario general en las decisiones «adoptadas por la asamblea de la sección».
CSI ha crecido en los últimos años en número de votos y de delegados en las elecciones sindicales celebradas en Asturias de forma continuada, pero últimamente alguno de sus delegados ha plantado cara a la dirección regional que encabeza Ignacio Fuster, secretario general de la organización. Fuster asegura que aun no ha recibido, en ninguno de los dos casos -ni en el de Avilés ni en el de los tres delegados del sector de la minería-, comunicación oficial de la renuncia, por lo que considera que todavía no es el momento de hacer declaraciones públicas.
Fuster sí reconoce que un miembro de la dirección de Avilés le llamó por teléfono y fijaron a una reunión la semana que viene. Según asegura, a partir de ahí el sindicato podrá tomar, si corresponde, algún tipo de medida. Eso sí, garantiza que el local seguirá abierto porque «tenemos gente» en la ciudad que podrá «seguir atendiendo a los trabajadores». Tampoco ha querido analizar los casos de Hunosa, Nicolasa y Carrio por el mismo motivo, pero asevera que, una vez que reciba las comunicaciones oficiales, el sindicato hará público su punto de vista y las medidas que tiene pensado tomar.
La situación en Avilés
Los 14 miembros de la ejecutiva de Avilés han publicado un comunicado en su muro de Facebook en el que explican los motivos de su renuncia. En primer lugar, critican la decisión, por parte de la Ejecutiva de CSI-Asturies, «de imponer un tipo determinado de organización» en la Ejecutiva de CSI-Avilés «en contra de la voluntad de la propia ejecutiva avilesina». Según sostienen en la red social, ellos pretendían mantener una forma de organizarse «distinta y más adecuada a las necesidades y posibilidades del sindicato» en la comarca y que, a su juicio, «venía dando buenos resultados desde sus inicios, hace ya unos 10 años».
También lamentan otras medidas adoptadas por la dirección, como «la prohibición de acudir más de un representante de cada localidad a las ejecutivas regionales», lo que consideran «cambios arbitrarios» en el sistema de votación del órgano de dirección o la «politización electoralista» que, a su juicio, está sufriendo el sindicato.
Hunosa, Carrio y Nicolasa
Las dimisiones de los delegados en Hunosa, Carrio y Nicolasa se produjeron un día antes de la de los de Avilés. Los sindicalistas denuncian la «injerencia unilateral» de la dirección del sindicato en las decisiones adoptadas por la asamblea de la sección, un hecho que, según aseguran en un comunicado en su muro de Facebook, «rompe con los principios básicos del sindicato donde prevalece la autonomía de las secciones en cuanto a lo que respecta a asuntos de sus empresas».
A pesar de que celebraron una reunión para intentar acercar posturas, no fue posible el acuerdo debido, según sostienen los delegados, a la actitud «totalitaria» del secretario general. «Simplemente queríamos seguir teniendo la soberanía total en las decisiones que conciernen a nuestra empresa», concluyen.