El último informe del Ministerio de Educación revela que la enseñanza aún deja atrás a uno de cada cuatro asturianos
23 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Principado luce las estadísticas educativas con orgullo. Es uno de los estandartes que muestra cuando quiere hablar de políticas exitosas. Sin embargo, los números tienen luces y sombras. Las luces son que más de la mitad de los treintañeros asturianos ya cuelgan un título universitario de las paredes de sus casas, que el gasto por alumno es de los más altos del país o que consigue titular cada años a más del 86% de los que se sientan en las aulas de cuarto de Secundaria. Las sombras implican que aún se deja atrás a uno de cada cuatro estudiantes. La estadística publicada esta semana por el Ministerio de Educación muestra que el 75% de los jóvenes ha completado como mínimo la ESO. El otro lado de la misma moneda demuestra que todavía hay un 25% que no tiene ni siquiera la titulación mínima. Aunque pueda parecer una cifra grave, lo cierto es que solo dos regiones están mejor: País Vasco y Navarra.
La puesta en marcha de la polémica Ley Wert -Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce)- supuso el final de los denominados planes de diversificación curricular, una estrategia dirigida a los jóvenes con serias dificultades para poder graduarse en Secundaria, el certificado mínimo exigido en la actualidad. Esta medida generó muchas reacciones, ya que fue sustituida por la Formación Profesional (FP) básica que, en realidad, saca a los alumnos de la educación normalizada y les conduce a un itinerario de consecuencias todavía poco claras. Al margen de cuál es la medida más adecuada, solo el 75,5% de los asturianos entre 20 y 24 años están graduados en Secundaria. El porcentaje está por encima de la media nacional que aún está en el 68%.
La tasa de idoneidad es otro indicador muy relacionado. Mide a los 8, 10, 12, 14 y 15 años cuántos alumnos están en el curso que les corresponde por edad. Sirve, entre otras cosas, para ver cuántos han repetido. La edad que se suele tomar como referencia son los 15 años, justo antes de dar el salto al Bachillerato. En ese límite temporal, el 68,5% no ha repetido nunca. O lo que es lo mismo, el 31,5% sí lo ha hecho. La situación es mejor que la media de las comunidades y no está muy lejos de País Vasco y Navarra. Las tres comunidades eran las mejores hasta no hace mucho pero ahora Cataluña les ha adelantado con soltura. No han repetido nunca el 76,6% de los catalanes de 15 años.
Universitarios y becados
El Principado es, en cambio, la segunda autonomía con más titulados universitarios (ahora también llamados graduados, tras la adaptación al espacio europeo). El 52,9% de los residentes en el Principado con edades comprendidas entre los 30 y los 34 años ha terminado con éxito su educación superior. Solo cuenta con personal más cualificado el País Vasco. Detrás aparece Madrid, con un 50,8%.
Entre las sombras quizá también podría situarse el descenso en el gasto público por alumno. El último dato que el ministerio maneja en todas las comunidades es el de 2014. Asturias recorta casi 200 euros por estudiante, al bajar de 6.615 euros a 6.435. Estas cifras se ciñen en exclusiva a la escuela pública. Sin en el saco se mete también a los concertados, la cantidad es inferior y también ha caído en los últimos años. Ha descendido de 5.667 a 5.530 en el mismo periodo de tiempo.
Pese a los ajustes impuestos por la recesión, casi 23.000 estudiantes asturianos de las etapas no universitarias, tanto las obligatorias como las que no lo son, reciben una beca. Así consta en los datos que maneja el Gobierno central. Son más de 17.000 de Primaria, Secundaria y Educación Especial y más de 5.600 de Bachillerato, FP, programas de cualificación profesional inicial y de enseñanzas artísticas. Estos números corresponden al curso 2014/2015, que es el último que tiene cerrado hasta el momento. Así, en Bachillerato, las ayudas llegan al 17% de los alumnos, que reciben de media 1.444 euros.
¿Cuántos años se sentará un alumno en un aula?
Los niños asturianos que empezaron a cursar primaria en septiembre del 2014 se pasarán sentados en las aulas de escuelas, colegios, institutos y facultades, de media 17,6 años. Si es chica, un poco más que los chicos. Esta otra estadística se denomina la esperanza de vida escolar en el sistema educativo a los seis años y mide la expectativa depositada en los que ahora empiezan en función de la experiencia de sus predecesores. La diferencia entre regiones es apenas imperceptible con una horquilla que oscila entre los 17 y los 18. Hay una única excepción, La Rioja. Los riojanos pasarán casi 21 años en las clases, en concreto, 20,7.