La investigación de incendios echa humo en Asturias

La Voz REDACCIÓN

ASTURIAS

Efectivos del Sepa en un incendio forestal. ARCHIVO
Efectivos del Sepa en un incendio forestal. ARCHIVO SEPA

Personal de las Bripas defiende el actual modelo coordinado de trabajo bajo el paraguas de Emergencias. Agentes del Medio Natural y Usipa denuncian movimientos de la Gerencia

16 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

«Estamos sorprendidos. El sistema de trabajo que tenemos funciona y lo único que queremos es seguir como hasta ahora». Esas son la palabras de Javier Jiménez, representante de las Brigadas de Investigación de Incedios Forestales del Principado de Asturias (Bripas) tras conocer que la Asociación Profesional de Guardas del Medio Natural del Principado de Asturias (Agumnpa) ha alertado sobre la inminente deriva de este colectivo hacia labores meramente administrativas. Las Bripas han emitido un comunicado en el que dicen representar al 75% de sus miembros, tanto los Guardas del Medio Natural como los Bomberos del Servicio de Emergencias del Principado (Sepa). Niegan que se esté «dinamitando la investigación de los incendios forestales en Asturias, tal y como afirman desde el sindicato Usipa y Agumpa» y defienden el actual modelo de trabajo.

Existen, por tanto, dos visiones. Usipa y Agumpa denuncian la deriva de las Bripas hacia labores meramente administrativas, despojándolas de todo contenido y desvirtuando su verdadera finalidad en la lucha contra la actividad de los pirómanos. Aseguran que la Gerencia del Sepa pretende circunscribir su trabajo únicamente «a la realización de informes técnicos». Otro sector desmiente estas quejas, señala que el modelo no ha variado y que la coordinación entre diferentes cuerpos es el mejor modelo. 

Estas brigadas dependen funcionalmente del Sepa, pese a que en su estructura orgánica figura su dependencia directa de la Consejería de Presidencia y Participación Ciudadana; un órgano donde, a su juicio, deberían seguir para evitar que se produzcan disfunciones y neutralizar las situaciones de malestar que aseguran que se viven actualmente en la plantilla.

Otra visión

El colectivo de las Bripas cree que la denuncia de Agumpa responde, más bien, a intereses personales y que no tiene que ver con el buen funcionamiento y con la organización. «Cada uno tiene su opinión, pero lo que no se puede es utilizar argumentos falsos. Nos sorprende una visión tan limitada cuado nos dicen que somos nosotros los que queremos limitarla», afirma Jiménez. Para este guarda, la importante labor que se está llevando a cabo se debe al sistema coordinado y multidisciplinar de todos los equipos, que están formados tanto por Guardas del Medio Natural como Bomberos del Sepa. «Desde el año 2003 se han investigado 2.081 incendios forestales en Asturias consiguiendo, en colaboración y coordinación, tanto con la Fiscalía del Medio Ambiente del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) como con el Seprona de la Guardia Civil, más de 80 sentencias condenatorias por delitos de incendios forestales», señala.

Por lo tanto, los integrantes del colectivo afirman que «ni entendemos, ni compartimos planteamientos que cuestionen esta labor conjunta, ya que únicamente se pretende desligar al Sepa de la investigación de los incendios cuyas competencias le corresponden por ley». Afirman además que descomponer las Bripas y trasladar la investigación, única y exclusivamente a los Guardas de Medio Natural «supondría destruir el trabajo conjunto desarrollado desde hace 15 años por estos equipos mixtos». Jiménez y sus compañeros exigen al Consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, mantener un encuentro en el que puedan ser escuchados y mostrar su postura respecto a un conflicto, que según su opinión «han generado, de manera unilateral, sólo tres miembros de las Bripas».

En cambio, Agumnpa  ha advertido de que si el Sepa sigue adelante con sus intenciones de circunscribir su trabajo únicamente «a la realización de informes técnicos», como aseguran que es el objetivo prioritario que les ha transmitido la Gerencia, se estará favoreciendo «la impunidad de los pirómanos» y desencadenará en la paulatina «desaparición» de las tareas de investigación que han propiciado excelentes resultados en la lucha contra incendios en el Principado.