Solo 48 equipos: mejor, ya puestos, 64

César Casal González
César Casal CORAZONADAS

OPINIÓN

17 ene 2017 . Actualizado a las 08:24 h.

Venga, todo por hacer caja. El fútbol es el circo del siglo XXI. Opio para el pueblo. La codicia va a terminar con el espectáculo. Partidos a todas horas, todos los días. Partidos que aburren a los rebaños. Motivo: cargan las competiciones hasta el absurdo. Ya está dicho. La Champions es un rollo patatero hasta que llega a octavos o casi a cuartos. La Liga Europea es como un torneo de verano. Solo se sigue en las ciudades donde sus equipos están clasificados. La sensación que va en aumento con el fútbol es que cada vez se repite el mismo partido. Hasta el infinito y más allá. No me extraña que las televisiones apuesten por las series bien hechas. Y ahora llega Infantino y cumple su promesa, una promesa que era una amenaza. Una promesa que solo había hecho para conseguir el respaldo de las federaciones de los países remotos. Ahora tendremos un Mundial con 48 equipos. Fascinante. Enfrentamientos que antes se daban en las liguillas de clasificación, en la gran cita del Mundial. Choques entre Azerbaiyán y Malta. Clásicos como Islas Feroe contra Islas Salomón. Buscan el efecto Islandia en la pasada Eurocopa. Pero muy pocas veces se vivirá que los pequeños tumben a los grandes con la honda de David. Lo hacen para multiplicar lo que mueve todo este circo que es el dinero, dinero que todavía se escapa al control de los impuestos en un escándalo sin fin. Un Mundial de 48 equipos es una suma de bostezos hasta la siesta final. Sucederá como con la Champions, en cuartos de final estarán las ocho selecciones de siempre. Y todo lo que pase antes será una trama absurda que solo entretendrá a los aficionados del país que por primera vez juega un Mundial sin merecerlo ni de lejos. El fútbol adormeciendo al planeta mientras cuatro plutócratas cuentan dólares.