Una burbuja llena de recursos

Rafael Ramiro PROFESOR ICADE BUSINESS SCHOOL

OPINIÓN

19 mar 2017 . Actualizado a las 17:44 h.

Nada de burbuja o moda pasajera. El de los eSports es uno de los sectores con mayor potencial de crecimiento en la industria del entretenimiento. ¿En qué baso mi tesis? En que pocos fenómenos aúnan el interés de tantas industrias con los recursos necesarios para consolidar su crecimiento.

Sin ánimo de ser exhaustivo, voy a nombrar algunas que conozco bien por haber trabajado en ellas. Las telecos necesitan contenidos para vender conectividad. Y los eSports les permiten atraer a clientes que demandan conexiones de alta calidad. Buscan dinamizar este sector desde el inicio, controlando los derechos de promoción y retransmisión a un coste razonable. Y los fabricantes de móviles y equipos electrónicos comparten ese interés por razones obvias. También la industria del videojuego gana con los eSports. Les genera mayor demanda de nuevos productos vinculados con esta nueva forma de competir y crea puestos de trabajo en un sector en reconversión tras la aparición de la banda ancha. Incluso la universidad está interesada en su éxito. Nada mejor que poder mencionar a jugadores de éxito y una industria en auge para poder vender el creciente número de titulaciones sobre videojuegos que inundan nuestras universidades. Mención especial requiere la industria del deporte profesional. El ya clásico «esto no es deporte, es un negocio» justifica que los clubes apoyen los eSports como medio para reforzar y monetizar sus marcas. Ya están creando franquicias de sus equipos en ligas físicas y ahora también crean franquicias digitales para competir a nivel nacional e internacional. Una manera fácil de extender los beneficios de la marca y de fidelizar la base de aficionados.

A medio plazo, también la industria de la televisión y los grandes de Internet ven la irrupción de los eSports como una nueva vía para aumentar sus audiencias y generar ingresos publicitarios. Una enorme pompa llena de recursos que algunos ven como una burbuja y que, en realidad, es una oportunidad de negocio para muchos. Y si no, que se lo digan a los emprendedores españoles que están trabajando en esta línea.