¿Puede la plaza de abastos de Pola de Siero convertirse en un buen escenario de conciertos?
COMARCAS
El ayuntamiento encarga un estudio para mejorar las condiciones acústicas del singular edificio sin alterar su estructura
24 may 2017 . Actualizado a las 15:02 h.La singular forma de la cubierta de la plaza de abastos de Pola de Siero es lo primero que llama la atención del edificio, que está protegido. Esa modulada estructura de hormigón con un interior libre de columnas es obra de Ildefonso Sánchez del Río, data de 1930 y en los últimos años se ha convertido en un referente en la programación socio-cultural del concejo de Siero y de la zona central. Ha sido sometida a diferentes rehabilitaciones pero aún puede tener una más pendiente. Su singular diseño genera problemas de sonido en el interior, con fuertes reverberaciones. Por esa razón, el ayuntamiento ha encargado un estudio de las condiciones acústicas de la plaza, para saber qué medidas se deberían adoptar para poder organizar conciertos en condiciones óptimas.
La plaza ha sido escenario de actuaciones en diferentes etapas pero el resultado nunca ha sido demasiado bueno. La Sociedad de Festejos, por ejemplo, organiza desde hace varios años durante Les Comadres espichas con conciertos musicales. Sin embargo, el sonido está lejos de considerarse óptimo. Así que el consistorio ha decidido tomar cartas en el asunto. Aún no hay ninguna solución clara. El asunto es delicado, ya que no se pueden adoptar medidas que alteren la construcción o dañen la bóveda.
El estudio
El alcalde de Siero, Ángel García, y la concejala de Urbanismo, Empleo y Desarrollo Económico, Noelia Macías, han presentado los detalles del estudio de las condiciones acústicas. Este trabajo tendrá que determinar qué actuaciones se pueden realizar, teniendo en cuenta las particularidades arquitectónicas. La propuesta de la empresa adjudicataria, que tiene una larga experiencia en la insonorización de equipamientos, es realizar una medición de la respuesta acústica. Esto se traduce en analizar el tiempo de reverberación, las focalizaciones y el nivel de ruido de fondo. Todo este trabajo se realizará con la plaza vacía, en un día sin mobiliario ni actividad. Con estos resultados, la firma propondrá una solución, tanto de diseño como de materiales.
El alcalde ha apelado a la prudencia, ya que todavía no hay nada definitivo. «Primero tendrán que decirnos cuál es el problema y las posibles soluciones y luego valoraremos qué hacermos, si es una solución móvil o fija y qué presupuesto tendría», ha matizado. La concejala Noelia Macías, por su parte, ha recordado que la singularidad arquitectónica del espacio hace necesaria «una solución poco invasiva, ya que o se pueden realizar anclajes de ningún tipo en la bóveda».
El plazo de ejecución del estudio es de apenas una semana y se realizará a lo largo del mes de junio. Esta iniciativa ya estaba recogida en los presupuestos de 2017, con una partida de poco más de 2.000 euros (2.160 euros).