El teatro de La Laboral recupera la versión de Saltantes de «El método Grönholm»

LA VOZ GIJÓN

CULTURA

La adaptación de la aclamada pieza de Jordi Galcerán dirigida por Cristina Suárez se representa el viernes en la Ciudad de la Cultura

11 may 2017 . Actualizado a las 08:43 h.

Este mes se cumplen 14 años del estreno en la sala Tallers del Teatre Nacional de Catalunya de una pieza destinada a convertirse en una referencia y -el tiempo lo dirá- un clásico. Jordi Galcerán era su autor, y Sergi Belbel el que sería el primer director de una larga serie de versiones de un drama que, contra sus propias pretensiones, también hace reír. Hay adaptaciones por todo el mundo, tanto sobre las tablas como en la pantalla cinematográfica. Y el teatro asturiano también tiene la suya. El método Grönholm, tal y como lo dirige Cristina Suárez y lo interpreta la compañía Saltantes Teatro, llega al escenario del teatro de La Laboral este viernes, a partir de las 20,30.

Alberto Rodríguez, Carlos Mesa, Nerea Vázquez y Luis Alija interpretan a los cuatro únicos personajes de esta pieza despojada y en un solo acto: son los candidatos a un jugoso puesto de alto ejecutivo en una multinacional de prestigio. Ellos creen que han acudido a una entrevista de trabajo convencional, pero no es así. Se enfrentarán -literalmente- a una extraña situación que revelará sus límites morales y emocionales, y que de paso pondrá también a prueba los del espectador.

Palabra y pura fuerza actoral son las dos herramientas casi exclusivas en una dramaturgia tan despojada, incluso aún más, como la que originalmente concibieron Galcerán y Belbel en 2003. Un espacio casi vacío para reflejar la evolución de unos personajes encerrados en un no-lugar que recuerda a otros de la historia del teatro o el cine contemporáneo, desde Beckett a Buñuel, pero que no habla de nada abstracto o metafísico, sino de algo bien concreto: el efecto sobre nuestros valores de una competitividad feroz. Un asunto que, en los años que han transcurrido desde su estreno, no ha hecho más que añadir carga de profundidad a El método Grönholm. Porque en 2003 nada hacía pensar en una crisis económica que da aún más contexto a una pieza imprescindible, ahora con el marchamo del mejor teatro hecho en Asturias.