Bradley Lowery, el niño con cáncer que triunfa en Inglaterra

La Voz

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El pequeño hincha del Sunderland y el futbolista Defoe se conocieron en el hospital. Su tierna amistad ha conmovido al fútbol inglés, que se ha volcado en ayudar a este «pequeño gran hombre»

07 jul 2017 . Actualizado a las 18:13 h.

Era un día especial para Jermain Defoe. Cuatro años después, el delantero volvía a ser convocado por la selección de Inglaterra. Con 34 años, el futbolista del Sunderland completó su buen momento anotando el primer gol de su selección ante Lituania. Pero la dedicatoria de ese gol tenía un protagonista indiscutible: Bradley Lowery. Un pequeño gran fan, de tan solo 5 años, incondicional de Jermain Defoe, y ferviente seguidor del Sunderland que sufre un neuriblastoma, un tipo de cáncer infantil que se encuentra en fase terminal.

En el 2013, Bradley fue diagnosticado de cáncer y desde entonces no ha cesado en el intento de encontrar un tratamiento que le permita alargar su vida. Hace tan solo unos meses varios futbolistas del Sunderland le visitaron en el hospital. Ahí surgió le flechazo entre ambos y una de sus imágenes más tiernas. La química que surgió entre él y Defoe en aquel instante ya no se romperá nunca. Bradley no se quiso separar ni un instante del delantero y disfrutar de la felicidad que le proporcionaba el momento por lo que el jugador decidió quedarse a dormir junto a él. El propio Defoe se quedó sin palabras tras vivir ese momento junto al pequeño. «No tengo palabras para definir lo que me ha hecho sentir este chico increíble», afirmó. Desde entonces su amistad es incondicional.

El perfil de Twitter que le ayuda a combatir la enfermedad dice «Los médicos dicen que no se puede hacer nada más pero eso está por ver». Y en esa lucha Defoe es su mejor aliado. El futbolista «le regaló» la posibilidad de ser nombrado autor del mejor gol de diciembre del 2016. El niño participó en un calentamiento del equipo previo a un partido ante el Chelsea, durante el cual anotó un penalti y, que de manera simbólica, la Premier League lo calificó como el mejor gol del mes.

En la vuelta de Defoe a la selección, Bradley tenía que estar presente y el futbolista quería que le acompañase en su vuelta al verde. Ambos encabezaron la salida de Inglaterra al campo. Tras el partido, Defoe agradeció al niño su presencia en el campo para hacer que fuera «un día increíble».

Gracias a su historia su enfermedad ha tomado importancia. Con tan solo 18 meses fue diagnosticado de esta enfermedad y tras dos años de lucha parecía que la pesadilla había terminado pero todo quedó en un espejismo. En julio del 2016 recayó y los médicos son muy poco optimistas a la hora de hablar de posibilidades de curación. Pero su familia no cesa en el intento, a pesar de lo costoso de su tratamiento. El Everton donó 200 mil libras esterlinas para su tratamiento, pero no es suficiente. Su objetivo ahora es conseguir el dinero suficiente para costear un tratamiento en Estados Unidos con oncólogos especializados en su enfermedad para lo que tienen que reunir al rededor de 700 mil libras esterlinas.

Pero este «pequeño hombre», que ya ha vivido más de lo que debería, es un niño lleno de ternura y de vida que no pierde la sonrisa, especialmente cuando se enfunda la camiseta de su equipo y salta al campo de la mano de «su héroe», Jermain Defoe.