Se puede decir que uno de los concursantes «metió la pata» con un inusual ingrediente, aunque lo cierto es que el reto propuesto por los jueces no era nada fácil
26 abr 2017 . Actualizado a las 18:46 h.Si hace unos días un planto de manzana asada con espuma de gazpacho y huevo poché relleno se convertía en «el peor plato» probado por los jueces de Masterchef, una nueva receta del programa de este martes acaba de superarlo.
La prueba consistía en cocinar con vísceras y casquería y Nathan, el concursante barcelonés de 27 años, preparó una sopa cuyo ingrediente principal eran nada menos que patas de gallina. Ni el aspecto ni el sabor agradaron al jurado, ni siquiera a Cayetana Guillén Cuervo, que era la invitada del día.
«¿Esto se come así?», le preguntó, incrédulo, el chef Pepe Rodríguez, al tiempo que cogía una de las patas con la mano y correteaba con ella, bromeando, por encima de la encimera, lo que provocó las risas del resto de jueces.
Jordi Cruz, mucho más serio, retó al concursante: «Vas a probarlo y luego me dirás si crees que lo tengo que probar». Nathan obedeció y, después de llevarse un trozo a la boca, invitó al jurado a hacer lo propio, únicamente señalando que estaba «un poco picante». «No me lo puedo comer. Eso es una goma», le dijo Pepe rechazando su invitación.
Quien sí lo probó fue Samantha quien, tras poner cara de asco, describió el plato como «agua sucia, dulce, picante...» y Jordi sentenció: «Es, seguramente, el plato más malo que he tomado en Masterchef, con diferencia».
«Está oxidado, 'picantisísimo', fuertísimo de canela... No se puede comer. Que yo te diga '¿lo puedo probar?' y que me digas que sí, una de dos: o no tienes criterio o tienes un problema en el coco», le espetó Cruz.
Nathan, lejos de agachar la cabeza, defendió su plato y aseguró que le pondría «un 6 o un 7», y añadió que «si esto es picante, en Tailandia mueres».
Fue entonces cuando Cruz utilizó su última baza para conseguir que el concursante pusiera los pies en la tierra. Se dirigió a Lorena, otra de las aspirantes, y la invitó a probarlo. «Si yo te enseño este plato, ¿te lo comes?», le preguntó. La concursante se llevó la cuchara a la boca, torció el gesto y contestó con un rotundo «no».
«Te invito a la eliminación», zanjó Jordi Cruz dirigiéndose de nuevo a Nathan. «Sentido común te falta un buen rato, y espero que esa prueba de eliminación te sirva para algo», concluyó.
Una vez más, el desastroso plato no pasó desapercibido en las redes sociales, que se mofaron de la sopa del barcelonés.
Por suerte para Nathan, el expulsado de la noche fue Salva. Salió airoso, pero no en Twitter.