Unos 20 tanques turcos cruzan la frontera siria

Laura Fernández Palomo AMÁN / CORRESPONSAL

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Tanques turcos entran en Siria
Tanques turcos entran en Siria STRINGER | REUTERS

El Ejército de Turquía bombardea posiciones del Estado Islámico en la ciudad de Yarábulus

24 ago 2016 . Actualizado a las 22:27 h.

Desde la madrugada del miércoles, Turquía combate con tropas terrestres en Siria. Hasta veinte tanques, con apoyo rebelde, traspasaron la frontera para reconquistar la ciudad de Yarábulus, el último feudo fronterizo del Estado Islámico (EI). El objetivo, según el ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, es terminar con toda amenaza extremista cercana y acontece cuando las fuerzas kurdas que liberaron Manjib de los terroristas estaban avanzando significativamente hacia el oeste del río Éufrates. El Gobierno de Damasco calificó la operación militar como una «violación» de su soberanía.

En la invasión terrestre sin precedentes, las fuerzas especiales turcas, conocidas como «boinas burdeos», están respaldas desde el aire por cazas F-16 turcos. Sin embargo el grueso de la operación está a cargo der fuerzas rebeldes vinculadas al Ejército Libre Sirio (ELS), que se diferencian del resto por los brazaletes rojos que portan y que son apoyados por un denso fuego de artillería desde Turquía. La incursión ha causado al menos 29 muertes y más de 3.000 personas han tenido que abandonar Yarábulus. El ELS anunció la toma completa de la ciudad, mientras los yihadistas se retiraban hacia Al Bab, en el suroeste. «No queremos a Daesh [acrónimo en árabe del EI] en Irak ni en Siria», argumentó Çavusoglu, aunque todo indica que el objetivo era evitar que Yarábulus fuera reconquistada por los kurdos y quede bajo su administración.

Las Unidades de Protección Popular (YPG), principal milicia kurda, se estaban aproximando a Yarábulus, en la ribera occidental del río Éufrates, que para Ankara supone una línea roja. «Son zonas kurdas, liberadas por los kurdos tras sangrientos combates con los terroristas», justificó en Moscú el representante del Partido de la Unión Democrática (PYD), ala política kurda. «Turquía se va a hundir en el pantano de la crisis siria. Será derrotada como Daesh», dijo su líder, Saleh Muslim.

«Por la unidad de Siria»

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, no tuvo reparos en reconocer que la operación va dirigida «contra los grupos terroristas de Dáesh y del PYD».

«Se trata de defender con todos los medios la unidad territorial de Siria», añadió en alusión a las supuestas ambiciones del YPG de proclamar en el futuro la independencia del territorio que domina.

La ofensiva, denominada Escudo del Éufrates, evidencia el giro de Turquía en la crisis siria. Precisamente, el vicepresidente de EE.UU., Joe Biden, estaba este miércoles de visita en Ankara. Pese al apoyo que Washington da las milicias kurdosirias en la lucha contra el EI, Biden afirmó que estas deben retirarse de la ribera oeste del Éufrates, como pide Turquía, o perderán el apoyo estadounidense. Ankara insiste en que no aceptará una entidad kurda y ha instado a Washington a reconsiderar su posición sobre el YPG.

Por otra parte, Biden rechazó que su país tuviera conocimiento previo del fallido golpe de Estado en Turquía y prometió que su país cooperará en la extradición de Fethullah Gülen, supuesto cerebro de la asonada. El primer ministro turco, Binali Yildirim ha reiterado su petición para que entreguen a Gülen sin más dilaciones.