«Si mi vida no vale, produzcan sin mí»

paula sabajanes BUENOS AIRES / E. ESPECIAL

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EITAN ABRAMOVICH | AFP

Huelga histórica de las argentinas para condenar el brutal crimen de una joven y exigir el fin de la violencia machista

20 oct 2016 . Actualizado a las 07:49 h.

«Si mi vida no vale, produzcan sin mí». Ese es el lema que sintetiza el espíritu de la primera huelga de mujeres de Argentina, que tuvo réplicas en todo el mundo, para exigir el fin de la violencia machista. La muerte de Lucía Pérez, una adolescente de 16 años violada y asesinada brutalmente hace diez días, ha provocado una ola de indignación. Colectivos sociales llamaron a la movilización para hacer visible la reivindicación de igualdad y para manifestarse contra los feminicidios. Bajo la consigna «#Niunamenos, vivas nos queremos», las argentinas tomaron la calle durante el Miércoles Negro, una jornada histórica con cese de actividades durante el mediodía y marchas en todo el país.

Bajo una lluvia intensa y vestidas de negro, miles de ciudadanas se unieron a la protesta. Sonaron los cláxones, los cánticos y las palmas para llamar la atención. Fue un clamor. La iniciativa tuvo una gran adhesión e impacto mediático. Las televisiones sustituyeron durante 60 minutos a sus presentadoras por imágenes de trabajadoras reunidas para la protesta. Se suspendió la actividad en aerolíneas y en tiendas, y las maestras llevaron la discusión a las aulas.

«Es un paro simbólico, que apunta a visibilizar el lugar de las mujeres en la sociedad y es también una ocasión para hablar de una serie de desigualdades que están detrás de los feminicidios», explicó Florencia Abate, una de las responsables de la organización del paro. La periodista Marta Dillon apuntó contra la «feminización de la pobreza» porque «recorta la autonomía» de las mujeres y «las deja más vulnerables ante la violencia machista» y demandó políticas de Estado para revertirla.

El presidente Mauricio Macri manifestó su adhesión a las consignas, pero los argentinos se desayunaron ayer con la noticia del proyecto de su Gobierno para modificar el Ministerio Público Fiscal que prevé, entre otros cambios, eliminar la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), la única en el país dedicada a la investigación de estos crímenes.

Una muerte cada 30 horas

En Argentina, una mujer muere cada treinta horas por violencia machista. Cada día, un niño queda huérfano por esos crímenes. Más del 90 % de los asesinatos de la capital se producen en el contexto familiar, el 20 % de las víctimas ya habían denunciado agresiones anteriores y solo el 7 % de las muertes del 2014 tienen sentencia condenatoria, según datos del Consejo de la Magistratura.

La mayoría social femenina es minoría en los cargos directivos en empresas, la Administración y la investigación, pero suma la mayor parte de los parados del país. Ellas son también el grueso de los estudiantes que pasan por la universidad, donde, sin embargo, se leen escasos textos firmados por mujeres.

Colectivos de todo el mundo se solidarizaron con esta movilización, que tuvo réplicas en España, Francia, Bolivia, Chile, Uruguay, Costa Rica, Estados Unidos.