«Qué se puede esperar de De Lorenzo si no nos ha llamado ni una vez desde que desaparecieron en el Mediterráneo»

No ha llamado ni una sola vez a la familia desde que hace 26 semanas Álex y Emilio López desaparecieran en el Mediterráneo, mientras realizaban una travesía de Cannes a Palma de Mallorca. Gabino de Lorenzo no se ha puesto a disposición de los hermanos, tíos y sobrinos de estos náufragos ovetenses, no les ha preguntado qué necesitaban ni se ha interesado por su situación personal. Pero sí les ha aconsejado resignación a través de los medios de comunicación. El delegado del Gobierno en Asturias respalda sin fisuras la decisión del Ejecutivo de suspender las labores de búsqueda y recomienda a sus allegados que «ha llegado el momento de admitir la realidad». Las declaraciones han molestado a esta familia que sigue sufragando con su propio dinero y con la ayuda de una cuenta de crowdfounding vuelos en avioneta que sobrevuelan la zona en la que podría encontrarse el barco. La portavoz Cristina López Cordero deja dos mensajes contundentes. En primer, ironiza con «la sensibilidad limitada» de De Lorenzo y con esa forma tan sibilina de llamarles «tontos». La segunda es que saben que las posibilidades de encontrarlos sanos y salvos son escasas pero que quieren «agotar todas las posibilidades y, sobre todo, intentar averiguar qué pasó».

El delegado del Gobierno en Asturias y el ministerio han tirado la toalla pero los familiares de Álex y Emilio, no. Mañana, viernes, a las ocho de la tarde han vuelto a organizar una concentración en la plaza del Ayuntamiento de Oviedo. Pretenden presionar a la administración para que no se olvide de que hay dos españoles desaparecidos en el Mediterráneo. También intentan mantener viva la movilización social. Cuentan con el respaldo de los dos náufragos españoles rescatados en Malasia, David Hernández y Marta Miguel, con amigos y ciudadanos particulares que están donando dinero de su bolsillo para continuar con la búsqueda. Hasta el momento, han podido pagar batidas aéreas organizadas desde Mallorca y Menorca, con avionetas de aeroclubes privados que, en muchos casos, les ceden los aparatos y solo les cobran la gasolina. Estos rastreos no han dado sus frutos, así que ahora pretenden modificar la malla del mar a peinar. La idea es que las avionetas partan desde Italia, de algún punto de la costa de Corcega o de Cerdeña. Como su autonomía es de cuatro horas, con este nuevo origen pueden llegar a explorar otro pedazo del Mediterráneo.

«Queremos agotar todas las vías. Y cuando las agotemos, nos sentaremos y pensaremos que hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance», insiste López Cordero hermana y sobrina de Álex y Emilio. Insiste en que no se agarran «a un clavo ardiendo». Son muy conscientes de que las posibilidades son escasas, que están viviendo una tragedia y que lo más probable es que haya sucedido algún tipo de catástrofe. Pero lo que le dicen al Gobierno y a Gabino de Lorenzo es que quieren saber qué pasó, que les sucedió a estos dos marineros experimentados. «Muchos a mi alrededor están indignados con las palabras del delegado del Gobierno. A mí no me causa tanto efecto. Qué se puede esperar de alguien que no se han interesado por nosotros en estos 26 días», insiste.

Lo que también lamenta desde el primer día, y ya ha denunciado en multitud de ocasiones, es que España no hizo todo lo posible, no lanzó un SOS internacional, no coordinó las labores de búsqueda y rescate, no actuó con prontitud. En definitiva, siente que no han hecho lo suficiente por los náufragos asturianos y que solo la sociedad civil y algunas administraciones locales han estado a la altura de las circunstancias.

---

---

---