Continúan las tareas de reconstrucción en dos de los edificios. Los afectados presentan reclamaciones millonarias. CSI denuncia que la situación de los hidrantes sigue igual que hace un año
07 abr 2017 . Actualizado a las 17:29 h.Un año después, el incendio de la calle Uría todavía colea. El bombero Eloy Palacio perdió la vida en las labores de extinción de las llamas y el trágico suceso conmocionó a una ciudad en la que permanece la huella del siniestro. Cuando se cumple el primer aniversario, las tareas de reconstrucción continúan en los dos edificios más dañados, los afectados presentan reclamaciones millonarias y parte de los bomberos asegura que todo sigue igual y que no se ha arreglado la situación de los hidrantes. El ayuntamiento sostiene que no hubo falta de agua y un nuevo informe de la Policía Judicial cuestiona ese argumento. 365 días más tarde, y aún con varios frentes abiertos, los compañeros de Eloy le rendirán homenaje frente al edificio siniestrado.
Archivo de la causa
El pasado mes de enero, la Audiencia Provincial confirmó la sentencia del Juzgado de Instrucción número 2 de Oviedo que archivó la causa abierta por el incendio en el que falleció el bombero Eloy Palacio. El auto desestimó los recursos presentados, entre otros, por el sindicato CSI y la comunidad de propietarios del inmueble, y confirmó el archivo de la causa dictado el pasado mes de octubre, al no apreciar que se produjeran hechos delictivos durante el operativo de extinción.
El fallo destacó la explicación de la Inspectora de Trabajo y Seguridad social, que señaló que lo que hubo «fue una decisión del trabajador de bajarse de la cesta, no una distracción, y tampoco hubo una orden que le pusiera en peligro». De esta forma, quedaba archivada la denuncia en la que se señalaban como factores del siniestro la falta de agua, de personal o los fallos técnicos que denunciaba la CSI.
A pesar de ello, el caso sigue sin cerrarse. Un nuevo informe de la Policía Judicial, hecho público ayer, determina de forma contundente que existieron «varias anomalías» en relación a los hidrantes y bocas de riego existente. «La falta de un abastecimiento adecuado de agua fue uno de los factores que condicionó las labores de extinción principalmente en la fase inicial de desarrollo del incendio, en la que se trataba de evitar la propagación del fuego a las plantas superiores», afirma el documento. El informe concluye además que existió en las labores de extinción una «falta de supervisión adecuada del dispositivo llevado a cabo por los bomberos» y que no se hizo una valoración adecuada del riesgo de colapso de la estructura.
Homenajes a Eloy Palacio
Desde el trágico suceso que le costó la vida a Eloy Palacio, se han sucedido los reconocimientos. Solo dos días después de su muerte, la totalidad de fuerzas políticas con representación en el Ayuntamiento de Oviedo decidieron por unanimidad iniciar los oportunos trámites para conceder la Medalla de Oro de la ciudad Oviedo a título póstumo al bombero fallecido, «en reconocimiento al extraordinario servicio a la comunidad y a los ovetenses que prestó durante años».
Hoy, día del aniversario, sus compañeros también le homenajearán. Convocados por la concejalía de Seguridad Ciudadana, está previsto que se concentren frente al edificio incendiado y que durante dos minutos suenen las sirenas de sus camiones en señal de recuerdo. Posteriormente, se hará una ofrenda floral en el parque del servicio, en el camino de Rubín.
Reclamaciones patrimoniales
Es un capítulo que permanece abierto y del que todavía no hay cifras concretas. Los propietarios de los pisos del número 58 de la Calle Uría y del 25 de Melquiades Álvarez han presentado reclamaciones. También los comerciantes, que tuvieron que cerrar sus negocios durante varios días por las labores de desescombro. Hasta el momento, y por una obligación legal para evitar incurrir en errores que posteriormente les impidan reclamar, los propietarios de los inmuebles ya han presentado un documento en el que especifican que las indemnizaciones superarán los 100.000 euros -en cada bloque-. Así cumplen con la legalidad a la espera de que finalicen las obras y puedan presentar una tasación definitiva.
Por su parte, el alcalde, Wenceslao López, ha dejado claro que el consistorio «defenderá la verdad y sus derechos», frente a las reclamaciones patrimoniales por el incendio. López ha recalcado que el ayuntamiento «no tiene ninguna responsabilidad». Sobre las reclamaciones ha afirmado que «estaba previsto». «Cuando hay un accidente donde tiene que intervenir el ayuntamiento, es típico que al final las partes afectadas pretendan que pague», ha comentado. Pero sostiene que «el ayuntamiento no tiene ninguna responsabilidad y hará valer la verdad y sus derecho». Según el regidor local, «unas compañías de seguros tendrán que hacer frente a los costes, y el ayuntamiento defenderá sus derechos dentro de ese marco».
«Todo sigue igual», asegura la CSI
A pesar de las trágicas consecuencias que tuvo el incendio, desde la CSI sostienen que las deficiencias no se han corregido. Miguel Ordoñez, delegado del sindicato en Bomberos Oviedo, asegura que «sigue todo igual» y acusa al ayuntamiento de montar un «paripé» que no ha servido para corregir la situación. En su opinión, la investigación «no está cerrada» y recuerda el «descontrol» que se vivió hace ahora un año.
En opinión de Wenceslao López, el panorama es bien distinto. Sobre la situación de las bocas de riego e hidrantes del casco urbano ha asegurado que «no tienen nada que ver en absoluto con el accidente», pese a que «hay unas partes que tratan de buscar argumentos para defender sus intereses, y entre ellos han intentado utilizar hidrantes y bocas de riego». «Las bocas de riego sirven para regar, no para apagar incendios, y está demostrado que el agua fue suficiente», ha añadido. El último informe de la Policía Judicial contradice esta afirmación. «Entiendo», ha concluido, «que los afectados quieran utilizar eso para sus intereses, pero se ha demostrado que esa no fue la causa».
Falta de personal
Otro de los aspectos que denuncia el sindicato es la falta de personal y el envejecimiento de la plantilla. El ayuntamiento afirma que está atado de pies y manos y que debe ajustarse a la legalidad y cumplir la tasa de reposición -el último año del 100% en Bomberos y Policía- motivo por el que no ha podido renovar la plantilla como le gustaría. Desde la CSI argumentan que «no cumplieron esa tasa de reposición» y critican que «dejaron morir la plantilla». Para compensar esa situación, sí que han contratado personal interino, aunque Ordoñez considera que harían falta entre 20 y 30 personas para tener un cuerpo de bomberos eficiente. En la actualidad, según la CSI, el ayuntamiento tiene menos de 60 efectivos.