Marcelino Gª Toral tenía razón

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Marcelino
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Artículo de opinión

16 dic 2016 . Actualizado a las 10:57 h.

Con el retorno del Villarreal a Gijón a la vuelta de la esquina, muchos tenemos en el recuerdo las descalificaciones públicas sufridas por Marcelino García Toral hacia su profesionalidad por perder un partido. Algo que también ocurrió frente al Deportivo en la semana previa, o en Sevilla con el Granada, encuentros en los que ambos clubes se salvaron justo una semana antes de recibir a Real Madrid y Barcelona respectivamente, en un final apretado por LaLiga que habría significado su posible descenso.

Resulta curioso que se haya hablado más del sportinguismo de Marcelino, entrenador que no salvó a los rojiblancos contra el Deportivo, que de las rotaciones masivas de Zidane frente a los propios gallegos o de las palabras de Javi Fuego sobre su cariño a la entidad asturiana duranta la pasada semana, ¿será porque tuvieron la fortuna de sacar adelante sus encuentros con resultados favorables? como podría haber ocurrido al contrario manteniendo su misma actuación. Yo no podría dormir tranquilo sabiendo que mi presión sirvió para que el culpable de coger al Villarreal en mitad de la tabla en Segunda y volver a darle brillo en Europa haya sido despedido en mitad de la preparación para la Champions League.

Ante el acoso y derribo sufrido, Marcelino se vio obligado a hacer una rueda de prensa con las siguientes declaraciones:

«En este momento requiero al señor Martin Presa para que se retracte en las próximas horas por su desafortunada opinión publica, por la comparación entre mi persona y el piloto de Lufthansa. Ni estoy loco, ni soy un asesino, mi profesión es ser entrenador de fútbol, honrado y profesional. El señor Presa me ha insultado y ofendido. Si no rectifica de inmediato ejercitaré las opciones legales oportunas»

Ante lo que el presidente del Rayo Vallecano tuvo que rectificar asegurando que el ejemplo que puso era cierto, pero tenía la intención de restar culpa a su compañero Roig, como la del dirigente de Lufthansa.

A día de hoy, 14 de diciembre de 2016, pasados unos meses y sin que nadie haya podido demostrar nada en su contra, se puede asegurar que Marcelino García Toral tenía razón.