Rubi, las áreas y la flor

Andrés Menéndez GIJÓN

SPORTING 1905

Rubi
Rubi

El técnico catalán mejora todo menos el resultado. La suerte tampoco le sonríe

15 mar 2017 . Actualizado a las 14:41 h.

Cuando el Sporting firmó a Rubi, con el firme convencimiento de Nico Rodríguez, el pensamiento del mundo del fútbol era unánime: con el fichaje del técnico de Vilasar de Mar se firmaba un hombre metódico, trabajador, idealista y profesional. Su llegada lo cambió todo.

Joan Francesc revolucionó el club con sus ideas: implantó un nuevo dibujo táctico, otorgó más protagonismo a la línea de interiores, apostó por un estilo más ofensivo -basado en las presión alta-, relegó a la suplencia a hombres importantes, modificó el régimen de concentración -con más vigilancia en la alimentación y la nutrición-, aisló del vestuario a Fueyo y cambió la centenaria tradición del banquillo en El Molinón.

El equipo mejoró, pudo incluso aglutinar a los Abelardistas en la creencia de lograr el objetivo, pero sigue repitiendo errores del pasado. El Sporting de Rubi, como el del inicio de temporada, se rompe en las áreas. Cada error penaliza y resta puntos. Las dos líneas de gol -la defensiva y atacante- siguen cometiendo errores graves que restan puntos.

Rubi tampoco tiene suerte. El catalán ha merecido más puntos, y victorias, en muchos partidos. Pero Joan Francesc, a diferencia de otros, no tiene flor. Y el Sporting ha vivido demasiado tiempo en el jardín.