Los comicios miden el nivel de descontento de la población con la República Islámica después de la represión policial contra las protestas desatadas por la muerte de Amini
Bombarderos B-1 atacan más de 80 objetivos de las milicias y de la Guardia Revolucionaria iraní. Irak denuncia una «violación de su soberanía» mientras Damasco asegura que los ataques van a «resucitar a Estado Islámico»