Asturias vivió el julio más cálido desde 1961

Asturias ha tenido este año el mes de julio más cálido desde 1961 en el que registró una temperatura media de 19,7 grados -1,9 grados por encima del valor medio registrado desde 1981- y fue además el segundo periodo con las mínimas más altas y el tercero con las máximas más elevadas desde hace 51 años.

Según el avance del Boletín Climatológico Mensual de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), las temperaturas se mantuvieron en valores normales hasta el día 7 y subieron de forma continuada hasta diez jornadas después y, a partir día 10 se alcanzaron los 30 grados de máxima en casi toda la región, salvo en la franja costera, repitiendo máximos de temperatura por encima de ese valor varios días consecutivos hasta el día 19.

Récords

El día más caluroso fue el 17, cuando se superaron los 40 grados en varias estaciones y se registró el pico más elevado en Rioseco con 42,3 grados, mientras que en los últimos diez días las temperaturas se mantuvieron en torno a los valores normales o ligeramente por encima y la mínima más baja se dio el día 1 en Leitariegos con 2,8 grados y 2,9 en Pajares.

Aunque la duración del episodio de calor fue menor que la de agosto de 2003, el más largo hasta la fecha, el del pasado mes de julio ha superado los valores máximos que se registraron entonces y ha batido los récord de temperatura máxima en ocho estaciones meteorológicas de la región.

De esta forma la insolación se elevó en estaciones como las del aeropuerto a 231 horas de sol -el tercer julio más soleado desde que comenzaron los registros en 1969- y a 239 horas en la de Oviedo -el segundo valor más desde que se cuenta con datos (1973)-, cifras que superan en ambos casos en un 30 por ciento los valores habituales.

Sin apenas lluvia

En cuanto a las precipitaciones, julio resultó extremadamente seco y se registraron 16,9 litros por metro cuadrado en promedio regional, lo que equivale a un tercio de la media del periodo 1981-2010 con lo que el pasado mes se situó como el sexto más seco desde 1961 después de los de 1962, 2013, 1967, 1968 y 2020.

La escasísima precipitación se recogió principalmente en el episodio de tormentas que se produjo en torno al día 3, que dejó chubascos generalizados y particularmente intensos en la cordillera y zonas próximas, y sumó 46 litros por metro cuadrado en Pajares y 41 en Cuevas de Felechosa. Además, se registraron 3.542 descargas procedentes de rayos a lo largo de ocho días con tormenta y la racha máxima de viento fue de 82 kilómetros por hora en San Antolín de Ibias, informa Efe.