La situación de «quiebra» que ahoga a Xata Roxa y pone en riesgo su futuro

Ganaderos a los que se les adeudan «miles de euros», locales abandonados con renta «a deber», demandas de trabajadores «por impago de nóminas»… esta es la situación que ganaderos, sindicatos y asociados denuncian que se produce desde hace tiempo en Xata Roxa, sociedad mercantil de la Asociación Española de Criadores de Ganado Vacuno Selecto de la Raza Asturiana de los Valles (Aseava), pero que se ha intensificado en los últimos quince días.

Hablan, de hecho, de un verdadero «demantelamiento» y «quiebra» que hace más que tangible la posibilidad de que muchos ganaderos se queden sin cobrar los terneros que han criado y comercializado a través de dicha sociedad.

Borja Fernández, secretario general del sindicato ganadero URA, explica que la de Xata Roxa era una situación de la que eran conocedores «desde hace muchísimo tiempo», En este sentido, sabían que la situación «era complicada», si bien «como sindicato, al ser una empresa y asociación privadas» no pudieron actuar.

Explica que él mismo y «muchos afiliados» del sindicato que representa son socios de Aseava y es por eso que hace relativamente escasas semanas les llegaron noticias relativas a que «afiliados y ganaderos independientes no estaban cobrando por los xatos», así como de «demandas de trabajadores por impago de nóminas».

Del mismo modo, apunta que fueron conocedores de que Xata Roxa contaba con «cuatro carnicerías para venta y las están dejando hasta con un año de alquiler a deber». El secretario general de URA indica que Aseava «recibe mucho dinero público por trabajar para la mejora de la raza asturiana», por lo que no puede evitar preguntarse «cómo es posible que los gobiernos de España y Asturias no intervengan».

Aseava es una entidad constituida en el año 1981, tiene ámbito nacional y está reconocida oficialmente por el Ministerio de Agricultura como Entidad Colaboradora para la gestión del Libro Genealógico de la raza Asturiana de los Valles.

Resalta que desde Xata Roxa «empezaron a pagar mal más o menos desde hace un mes», si bien la situación ha ido empeorando, hasta el punto de que en los «últimos 15 días hay ganaderos a los que se les deben miles de euros y no hay manera de reclamarlos». Resalta que «este tema era un secreto a voces» y se ha enquistado hasta tocar directamente los ahorros de «medio centenar de afectados», aproximadamente. 

Desde URA alertan de que la pertenencia a la raza, y por ende a Aseava, afecta tangencialmente a otras cuestiones tales como la percepción de subvenciones, o las cuantías de las indemnizaciones de daños de la fauna silvestre sobre la cabaña ganadera.

Fernández reconoce que van a dar un «margen de unos días y en caso de que siga la situación se tomarán medidas».