Encontrar esa red de franquicias que cambiará tu vida

Al invertir en franquicia se invierte sobre seguro pues supone decidirse a formar parte de un modelo de negocio que, en realidad, ya ha triunfado.

La Franquicia: el modelo de negocio que triunfa a nivel global.

El año 2024 supuso un nuevo espaldarazo en nuestro país para este modelo de negocio. Afirmación que avalan las siguientes cifras:

• Más establecimientos: crecimiento del 1,8% y hasta los más de 78.000.
• Más facturación: crecimiento del 2,5% para superar los 27.600 millones de euros.
• Más empleos: crecimiento del 4.8%, superando ampliamente la barrera de los 300.000.

Por otra parte, el informe de la AEF (Asociación Española de la Franquicia) revela que las franquicias españolas se hallan presentes ya en hasta 140 países, descollando especialmente en sectores como la moda y los servicios de hostelería y restauración.

De todos modos, es probable que ya te hayas percatado de cómo ciertas marcas internacionales, que hasta hace algunos años no tenían cabida en nuestro país, se han expandido por tu zona de tránsito habitual con inusitada rapidez. Igual que ha sucedido con las franquicias españolas a lo largo de todo el mundo.

¿Cómo funciona el modelo de franquicia?

En primer lugar, cabe decir que, si estás interesado en el modelo de franquicia, aquí se te ofrece una enorme cantidad de información. Y, de hecho, la posibilidad de estudiar opciones de cara a una futura inversión. Tanto por nacionalidad natal de la cadena como desglosado por sectores.

Pero, antes que nada… ¿cómo funciona exactamente este modelo? Resulta sencillo de comprender: mediante la firma de un contrato, el franquiciado (inversor) obtiene del franquiciador (propietario de la franquicia en cuestión) la autorización para utilizar tanto su marca como su «saber hacer» (es decir, los productos y/o servicios que dicha franquicia oferta). Y, a cambio, paga un canon.

Por tanto, si el franquiciado se decide a montar un restaurante de la cadena «Saber Marinero», montará su imagen de marca en el nuevo establecimiento (cartel, decoración, uniformes, etc.), será puesto en contacto con los proveedores y recibirá información (confidencial) sobre cómo preparar tal receta de marisco en salsa o pescado a la plancha. Ya que ese establecimiento en concreto de «Saber Marinero» deberá ofrecer una experiencia muy similar, casi idéntica, al de cualquier otro de su marca.

La razón de que el modelo de franquicia haya logrado triunfar.

Pensemos una cosa: ¿qué es lo más difícil a la hora de lograr que un negocio triunfe? Pues ni más ni menos que lo que se suele denominar, popularmente, como dar con la tecla.

Evidentemente, se busca satisfacer una demanda determinada con la oferta que nosotros vamos a poner a disposición. Claro que… no resulta tan sencillo. A estas alturas de la película, seguramente ya existan en el lugar multitud de empresas que se dedican a lo mismo. Así pues, debemos encontrar un factor diferencial; algo que nos defina. ¿Qué podemos ofrecer nosotros, que otros no pueden?

La idea es, por tanto, lo más difícil de conseguir: esa imagen, ese sabor, ese determinado saber hacer.

¿Por qué triunfa la franquicia? Porque ya triunfó. Ahora, lo que hace es servirse del empuje de nuevos miembros para ser más grande, más fuerte y mejor. Cuanto más grande es una franquicia, mayor capacidad tendrá para ser conocida. Y, cuanto más te conozcan, mayor es la posibilidad de que compren aquello que ofertas. A cada nuevo franquiciado le interesa hacer las cosas bien, puesto que de ello dependerá su propio futuro. Ese empuje, esa ambición sana, generan crecimiento y beneficios.

El modelo de franquicia por antonomasia es el estadounidense, popularizado desde comienzos del pasado siglo. Seguramente, cuando pienses en franquicia, pienses en una compañía americana dedicada a la comida rápida. Pero, actualmente, este modelo de negocio ha copado todos los sectores.

Las ventajas de invertir en una franquicia.

La mayor ventaja, valga el juego de palabras, es que partes con ventaja. No todos los buenos empresarios son buenos creativos. Es muy difícil aunar la genialidad en varios campos. Pero, aquí, el modelo de negocio, con todos sus puntos fuertes, ya ha sido desarrollado. Ya está. Ahora puedes dedicarte a pulir las pequeñas cosas.

Ten presente que uno de los aspectos fundamentales de cualquier negocio es la publicidad. Pero el franquiciado ya cuenta con toda esa publicidad que acomete el franquiciador. Campañas que, por sí solo, él no podría sufragar.

Cuando el establecimiento abre sus puertas, es posible que quien pasa por el lugar ya lo conozca, haya probado aquello que le ofrece y, por tanto, se fie y desee repetir la experiencia. Eso supone contar con una base sólida; no se tiene que partir desde cero para ganarse toda esa confianza. Los primeros meses de los comercios suelen ser los más difíciles. Aquí, no tanto. El cliente potencial ya sabe lo que se ofrece. Y sabe que muchas otras personas han apostado por ti. ¿Por quién se decidirá? ¿Por ti o por aquel otro negocio que no conoce? Probablemente, por ti.

Amplísima variedad de sectores entre los cuales escoger.

Siempre que podamos escoger, es mejor dedicarnos a aquello que nos guste y/o en lo que seamos buenos. Este modelo no se limita a la restauración. Te permite invertir en ecológicas, automoción, construcción, servicios a empresas, ocio, moda, equipamiento e instalaciones deportivas, venta de artículos de belleza, mercado inmobiliario, etcétera.

Si lo tuyo es la educación artística, cuentas con opciones. Si quieres dedicarte a ofertar experiencias de realidad virtual, pues también. Presta atención a las opciones; quizá te sorprenda.

Invertir tu capital y prosperar invirtiendo en un modelo de negocio plenamente asentado.

En resumen: si cuentas con cierto capital y deseas convertirte en tu propio jefe y prosperar, medita apostar por el modelo de franquicia. Las ventajas son numerosas y podrás escoger aquella que mejor se adapte a ti.

Por último, ten presente que tú mismo, si has alcanzado el éxito, puedes convertirte en franquiciador.