Guillermo Martínez se hace con el 75.º Nadal con «Los crímenes de Alicia»

H. J. P. REDACCIÓN / LA VOZ

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Guillermo Martinez y Marc Artigau
Guillermo Martinez y Marc Artigau Andreu Dalmau

El escritor argentino gana el premio gracias a una intriga novelesca inspirada en el universo creado por Lewis Carroll

07 ene 2019 . Actualizado a las 08:50 h.

Guillermo Martínez (Bahía Blanca, Buenos Aires, 1962) se alzó anoche con la edición del 75.º aniversario del premio Nadal de novela con su obra Los crímenes de Alicia, una intriga libresca a medio camino entre Borges y Eco, avanzó la editorial Destino, que convoca el galardón. El narrador, matemático y ensayista argentino -que se mostró feliz por poder figurar en la nómina de vencedores junto a autores ilustres como Carmen Laforet, Miguel Delibes o Ana María Matute- construye una trama en torno a una serie de crímenes cometidos en Oxford y en la que tienen mucho peso los símbolos del universo imaginario de Alicia en el país de las maravillas, de Lewis Carroll. La ficción rescata además a los dos protagonistas de Los crímenes imperceptibles, novela con la que Martínez había obtenido el premio Planeta Argentina del 2003 y que fue adaptada al cine tres años después por Álex de la Iglesia, en Los crímenes de Oxford, que contó con los actores Elijah Wood, John Hurt y Leonor Watling.

Martínez -que presentó la obra bajo el título de Los papeles de Guildford y el breve pero indicativo seudónimo de G.- se impuso a los otros cuatro finalistas: La zapatilla por detrás, de Hisak; Erres, de Tomás Marín; Monos, de Ariel Crombet; y Seda de araña, de Antolina Ortiz Moore -única candidata que no recurrió a un nombre ficticio-. Así lo decidió el jurado integrado por Alicia Giménez-Bartlett, Care Santos, Lorenzo Silva, Andrés Trapiello y Emili Rosales, que dio a conocer su veredicto en la ya tradicional cena literaria del 6 de enero celebrada en el barcelonés hotel Palace. Dotado con 18.000 euros y la edición de la obra en Destino, el premio recibió este año 343 originales.

Artigau, premio Josep Pla

El mismo encuentro acogió el fallo del premio Josep Pla de prosa en catalán, dotado con 6.000 euros y que alcanza su edición 51.ª, y que se llevó el periodista y dramaturgo Marc Artigau (Barcelona, 1984), con su novela La vigília. El narrador, que concurrió bajo el seudónimo de Joan Ramírez i Ramírez y utilizó el título provisional de L’habitació de l’estiu, ha publicado un par de novelas escritas en colaboración con el periodista y presentador Jordi Basté. Al Pla se presentaron 32 obras, y quedaron como finalistas Animes de sal, de Josep Busquets; Blau medusa, de Johanna Lindgren (seudónimo); La casa dels bressols, de Jordi Ortiz; y Iulia Libica, de Jordi Romeu Carol.

Lejos queda aquel 1944 en que el escritor Ignacio Agustí puso en marcha -alrededor de la revista Destino y con el apoyo de Josep Vergés y Joan Teixidor- el premio Nadal. No pudo empezar mejor su andadura este galardón con una disputa entre las candidaturas de César González Ruano y Carmen Laforet, que se llevó la joven -tenía 23 años- y desconocida escritora por su novela Nada, que aún hoy es una de las cimas de la literatura de posguerra y de las letras españolas. Su éxito inmediato fue también la promesa de futuro para el premio, que partió de inicio con una relevancia inesperada.