Boya deja la dirección de la CUP por el «acoso psicológico» de un colega al que no apartan pese a su queja

Cristian Reino COLPISA | BARCELONA

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La exdiputada de la CUP en el Parlamento catalán Mireia Boya dice que necesita cuidarse y recuperarse de la agresión psicológica
La exdiputada de la CUP en el Parlamento catalán Mireia Boya dice que necesita cuidarse y recuperarse de la agresión psicológica @CUPNACIONAL

Señala que le supuso «una gestión emocional complicada todavía abierta»

29 mar 2019 . Actualizado a las 20:00 h.

La CUP va de crisis en crisis. Tras la tormenta causada por la decisión de Poble Lliure, una de sus formaciones internas más influyentes, de presentarse a las generales en contra del criterio de la dirección de la coalición, la dirigente Mireia Boya, diputada autonómica en la pasada legislatura, anunció este viernes su renuncia a la ejecutiva del partido secesionista porque necesita «cuidarse y recuperarse».

Boya, la única dirigente de la CUP procesada por la causa del 1-O (será juzgada en el Tribunal Superior de Cataluña junto a los anteriores miembros de la Mesa del Parlamento catalán), deja la dirección anticapitalista por haber sido víctima de un acoso emocional «continuo» y «una agresión psicológica» por parte de un compañero del partido.

En un principio habló de un miembro de la dirección, como ella, y dijo que, pese a su petición no fue apartado, pero a las horas tuvo que salir a matizar, porque las redes echaban humo con la rumorología, sobre quién puede ser el presunto acosador. «Quiero puntualizar que la persona en cuestión no es miembro del actual secretariado nacional ni del grupo parlamentario, sino un militante con quién he tenido que compartir espacios para las tareas derivadas de mi cargo», precisó. Boya añade que, «una vez más, nos centramos en el quién y no en el qué, y esto pasa por hacer correr rumores sin ningún tipo de fundamento y que pueden hacer daño a terceras personas» con lo cual pide «respeto, rigor y tiempo».

La dirigente anticapitalista aclaró además que su salida de la ejecutiva «no es un adiós sino un hasta pronto» y que necesita tiempo para cuidarse y recuperarse.

La CUP anunció que «la comisión feminista» de la formación «asume» la denuncia y que actuará de acuerdo con el protocolo de que dispone para abordar estas cuestiones. «Desgraciadamente, no podemos dejar de reconocer que no somos impermeables a un sistema patriarcal que atraviesa nuestras vidas y nuestras prácticas militantes», señaló la formación de la izquierda independentista.