El Supremo confirma que la cesta de Navidad es un derecho de los trabajadores

La Voz REDACCIÓN

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PEPA LOSADA

Una nueva sentencia del Tribunal considera que no se trata de un regalo

17 dic 2019 . Actualizado a las 08:41 h.

Dice la Justicia patria que las cestas de navidad son un derecho adquirido de los trabajadores. De regalo nada. El Tribunal Supremo volvió ayer a confirmar su opinión en un asunto que ya se ha convertido en clásico de cada Navidad. La Sala de lo Social confirmó ayer el derecho de los 1.600 trabajadores de Fujitsu Technology Solutions en España a recibir la cesta de Navidad del año 2016, que fue suprimida por la empresa de forma unilateral. Considera ahora el Tribunal que, al haberse dado ya en años anteriores, este artículo se había convertido en una condición más del contrato.

La polémica surge en el año 2013, cuando Fujitsu decidió dejar de entregar la cesta que repartía a toda su plantilla anualmente amparándose en un plan de reducción de costes. El único año en el que había dejado de entregarse el presente fue en 1997, cuando fue sustituida por un cheque regalo. Desde el 2016, la empresa no volvió a implantarla a pesar de que entre el 2014 y el 2016 las representaciones sindicales así lo solicitaron. Ahora, ha sido el Supremo el que ha entrado en este tira y afloja entre empresa y sindicatos.

Más casos

No es la primera vez que el Supremo se pronuncia sobre las cestas de Navidad.

El pasado mes de noviembre también fallaba a favor de los trabajadores de la cablera gallega R, que se quedaron sin cesta de Navidad en el 2017 coincidiendo con la absorción de la sociedad por la vasca Euskaltel. El fallo del tribunal sentenció que la empresa debía ingresar a los 190 trabajadores que estaban en plantilla por aquel entonces un total de 60 euros como compensación.

Tampoco se libró la empresa de call center Transcom, que en el 2018 tuvo que repartir entre sus empleados la cesta de Navidad que correspondía al 2016. Y es que, después de repartir a sus trabajadores este detalle durante casi una década, la compañía decidió sustituirlo por un cóctel. Y no servía como justificante para Transcom el alto coste de las cestas, porque la última (la del 2015) constaba de un simple panettone de 4 euros.

Otra sentencia, del 2016, obligaba a Mecalux a restituir la cesta de Navidad del 2012.