La rápida evolución del cambio entre ambas divisas tiene distintos efectos en la economía asturiana
23 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Por primera vez en 20 años, el euro y el dólar están a la par, y la evolución ha sido muy rápida. Esto quiere decir que hace un año, por un euro nos daban 1,18 dólares y ahora solo nos dan un dólar, una gran variación en términos macroeconómicos.
Santiago Álvarez, profesor de Economía Aplicada de la Universidad de Oviedo y vocal del Colegio de Economistas de Asturias, explica el motivo: «La Reserva Federal ha llevado a cabo una política económica más agresiva que Europa, porque tiene más interés en controlar la inflación. Eso ha hecho que hayan subido los tipos de interés antes, algo que tendrá que hacer el Banco Central Europeo si no quiere que el euro siga perdiendo valor».
Pero, ¿en qué afecta todo esto a la economía asturiana? Pues todo depende del sector al que miremos. Al igual que Álvarez, como pronostican casi todos los expertos, un efecto importante es que se avecina una subida de tipos, que repercutirá en la subida del índice Euribor. Acostumbrados a un dato negativo o cercano a cero, todas las hipotecas vinculadas el Euríbor han disfrutado durante años de un interés bajo, pero a partir de ahora empezarán a encarecerse.
En cuanto a sectores, Santiago Álvarez cree que, en principio, el que más sufre directamente es el secundario: «Todo lo que dependa del mercado energético y de materias primas, que se negocia en dólares, es lo más afectado, en este caso el sector industrial». En el caso de Asturias, la industria es una gran consumidora de ambos productos, por tanto, sus costes han subido con la evolución del cambio euro-dólar. Al encarecer sus costes, también deben subir el precio de sus productos, y eso acaba traduciéndose en inflación: otro golpe a nuestros bolsillos.
Álvarez explica que no todo el problema viene de la energía. «También la importación de determinados elemenos como chips o componentes que vienen de China, que sufrió un cuello de botella de exportaciones, se negocian en dólares y ahora nos salen más caros». Aunque el peso de la industria en la economía asturiana representa en torno al 15%, sigue siendo un considerable golpe económico. Además, según datos de la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Instruiales (Sadei), el saldo comercial del Principado no es favorable en esta situación, porque importa más de lo que exporta.
Si bien hubo meses el año pasado en los que la balanza fue positiva, desde febrero hasta mayo de este año hemos venido comprando más de lo que vendemos (717 millones de euros en compras frente a 612 en ventas el último mes contabilizado). En la parte positiva, con un euro débil, la exportación se vuelve más competitiva para las empresas asturianas que vendan fuera sus productos.
Mejor para el turismo
El mayor peso económico en Asturias es el del sector servicios (en torno al 80%), lo que incluye el turismo. En este caso, según señala el profesor Álvarez, la coyuntura es más bien positiva: «Para el turista europeo el cambio no nos favorece, puesto que paga en euros. Pero para los norteamericanos (y de otras nacionalidades) que vienen con dólares, la situación les viene muy bien puesto que les dan más euros por cada dólar, así que les compensa venir». Por el contrario, no es buen momento para que el turista asturiano viaje a EEUU, puesto que le saldrá mucho más caro que hace un año. También el mayor coste de los combustibles encarece, por ejemplo, los billetes de avión.