La mentira del milenio

Tamara Montero
Tamara Montero CUATRO VERDADES

OPINIÓN

17 jun 2017 . Actualizado a las 10:42 h.

Cuando ellos tenían nuestra edad. Cuando ellos tenían nuestra edad ya habían firmado un contrato indefinido. Tenían un buen salario que les permitía pagar religiosamente la hipoteca y el préstamo del coche. Cada año, viajecito en vacaciones. Cuando ellos tenían nuestra edad. Cuando ellos tenían nuestra edad nosotros ya habíamos nacido. Después de tomar un bocadillo de chocolate, empuñábamos el lápiz para hacer los deberes. Nos habían encastrado en el cerebro que esa era la forma de salir adelante. Estudia. Que si estudiábamos, el día de mañana viviríamos mejor que nuestros padres. Mucho mejor que nuestros abuelos, que en su mirada todavía llevaban la penuria de la posguerra. Cuando ellos tenían nuestra edad, empezaron a inflar la burbuja. Cuando nosotros tuvimos su edad, nos estalló en toda la cara. Y nos dimos cuenta. Era una mentira. Todo lo que nos habían dicho, era mentira. La mentira del milenio.

Ahora que nosotros tenemos su edad, no hay ni trabajo, ni coche, ni hipoteca. El futuro que tanto nos pintaban, si existe, está fuera de estas fronteras. Solo nos importan las redes sociales, dicen. Y para lo que usamos Internet es para comprar al mejor precio un billete -solo ida- y facturar , en un exceso de extras, un par de maletas. ¿Y los que se quedan? Si tienen suerte, a veces cobran. Y si hay contrato, aquello ya es una bicoca. ¿Hijos? Pero si no tenemos qué llevarnos a la boca. Y dicen que somos nosotros, que la culpa es nuestra. Porque ahora que tenemos su edad, que no su futuro, nos gusta usar el filtro Valencia.