Mujer «on»

OPINIÓN

16 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Empoderar a las mujeres y niñas no solo es lo correcto, sino que además es una medida acertada desde el punto de vista económico y esencial para poner fin a la pobreza y promover la prosperidad compartida.

En estos momentos en los que la humanidad está en constante cambio, me parece propicio redefinir el rumbo que como mujeres hemos trazado; y no me refiero a que hayamos sido las únicas que actuamos para llegar al punto en que estamos ahora, pero es cierto que somos responsables de ello. Y al asumir dicha responsabilidad la puerta de las oportunidades se abre de par en par.

Y a todo esto ¿Qué es empoderar? Para mi es básicamente ser autoconsciente. Saber que mi vida (económica, profesional, amorosa, etc.) depende únicamente de mí, que soy la responsable de todo lo que pasa en ella, que yo tengo el poder sobre mi misma, que me conozco, me valoro y busco desarrollarme al máximo. Es entonces cuando nuestro concepto de Mujer cambia.

Ya no jugamos el papel de la débil dama en apuros, ya creemos en nuestra capacidad de lograr lo que soñamos, dejamos las escusas a un lado; al vernos al espejo nos vemos invencibles, posibles dentro de todas las imposibilidades que fuimos cargando a cuestas. Nos liberamos en cada paso de esta eminente evolución.

Cuando te ves sin toda esa paja, cuando queda la verdadera tú, empiezas también a cuestionarte muchos pensamientos que dabas por válidos y ahora dejan de tener sentido. Que si una mujer «debe» de comportarse de tal o cual modo. Que si «tiene» que aceptar un sin fin de situaciones, solo por ser mujer. Entonces si hablamos de evolución, vayamos de Mujer a Mujeron y seamos literales en esto.

No entendamos este concepto simplemente como el de una mujer voluptuosa, ni tampoco lo pasemos al plano sexual, sino como el de una mujer consciente del inmenso poder que posee, de que sus sueños son más grandes que sus miedos. Que decide convertirse en todo lo que siempre estuvo llamada a ser. Que su fuerza y determinación impulsa a más mujeres a hacer lo mismo, a cambiar su realidad.

Y aquí viene el resultado, la acción palpable de todo este cambio: Emprender, ser autosuficiente, desarrollar nuestras capacidades, volvernos elementos vitales del ecosistema emprendedor como agentes de cambio generado el desarrollo en conjunto, desde nuestra propia comunidad.

Como unidad de mujeres empoderadas tomemos el destino en nuestras manos, diseñemos el mundo del que queremos ser parte, aprovechemos las oportunidades que se nos presentan y seamos la voz que tantas otras mujeres desean escuchar.