Papel pintado

Tamara Montero
Tamara Montero CUATRO VERDADES

OPINIÓN

27 nov 2017 . Actualizado a las 07:25 h.

Aunque no queramos, todos tenemos uno. Nuestro papel pintado. No sabes por qué está ahí. Ni siquiera recuerdas desde cuando ha estado. En los momentos más inoportunos aparece. Lo ves en el restaurante. Haciendo la compra. Esperando a que cambie el semáforo. Apenas un segundo. Pero cada vez repasas el dibujo. Te preguntas dónde. Dónde lo has visto. Por qué lo sigues recordando. Aunque no queramos, todos tenemos una. Una canción hipnótica. Y cuando la escuchas, actúas. Sin saber cómo. Sin saber por qué. Solo lo haces. Los acordes. Los acordes te han obligado. Porque aunque no queramos, todos tenemos ese sótano. Al que bajas poco a poco. En el que tienes miedo de meter los brazos. Porque algo ha pasado ahí. Lo sientes en los dientes. En las entrañas. En la cabeza. En el costado. Y un día, sin saber cómo, está nadando en el lago. Y al minuto siguiente coge el cuchillo con el que está cortando la pera y corre. Y se lo clava al chico de la toalla de al lado. Y hoy se llama Cora, y otro día será Armando. María, Lolo, José. Ana, Carmen, Gerardo. Todos tenemos una fosa. Un agujerito. Y allí lo vamos enterrando. Lo que no nos gusta. Lo que no debería de haber pasado. Eso es The Sinner. La historia de todos los que hemos cavado. La que enseña que a veces, cuando menos te lo esperas, todo vuelve. Y comprendes. Que hay que girar el pomo. Entrar al sótano. Y desenterrarlo.