Navajas en Génova

M.ª Carmen González Castro
M.ª Carmen González VUELTA Y VUELTA

OPINIÓN

20 jun 2018 . Actualizado a las 08:01 h.

El poder actúa como el Super-Glue: es el pegamento más potente que existe para mantener a un partido unido, porque si se gobierna, para qué pelear. Desalojado del poder, el PP está dejando ver otra cara. Que las rencillas estaban latentes, y en ocasiones emergían, es evidente. ¡Cómo olvidar la foto de las dos mujeres en las que más confiaba Rajoy, Soraya y Cospedal, separadas por una silla y sin dirigirse la mirada! Pero el control de las desavenencias ejercido por un Rajoy sentado en la Moncloa ha desaparecido tan pronto como el Mariano registrador se ha incorporado a su plaza de Santa Pola.

Solo 48 horas después de que se haya abierto el plazo para presentar las candidaturas, y una vez descartado el candidato que sobre el papel podía generar cierto consenso, Feijoo, las navajas empiezan a afilarse en Génova.

La pelea entre varios candidatos para hacerse con la presidencia del PP es una novedad en un partido acostumbrado al dedazo. Cómo se gestione esa carrera va a determinar cómo empieza a levantarse el PP a partir del 22 de julio. Y es importante para hacer frente a la otra novedad con la que tienen que lidiar los populares: por primera vez tienen un partido con peso, Ciudadanos, que les disputa los votos en un espacio ideológico que antes era solo suyo.