El valor de los analógicos

María Cedrón ¡CORRE FORREST, CORRE!

OPINIÓN

02 ago 2018 . Actualizado a las 08:10 h.

Cuentan que el ser humano es un animal de costumbres, pero a medida que pasa el tiempo creo que no es más que eso, un cuento. Ahora que el mundo está inmerso en una vibrante carrera tecnológica es el momento de cambiar hábitos. Más que ayudarnos lastran nuestro desarrollo personal e incluso profesional. No tengan miedo a adentrarse en territorios desconocidos porque una vez hayan cruzado el umbral serán parte del paisaje. La prueba de que no les miento es un informe sobre empleo a nivel mundial en el sector tecnológico publicado esta semana, donde destacan el índice de puestos de trabajo no tecnológicos en empresas del ramo. Aunque varía entre compañías como Amazon o Verizon, el porcentaje medio es del 43 %. Esos grupos, no cabe duda, requieren del saber de informáticos, matemáticos o ingenieros, pero no les basta para la gestión de equipos o para mejorar los resultados de los departamentos de ventas. Ahí es donde resultan imprescindibles perfiles con habilidades que nada tienen que ver con la tecnología. Aunque no esté de más que controlen, un poquito, las claves del html. Las multinacionales saben que mientras la Inteligencia Artificial no desarrolle un algoritmo capaz de entender la complejidad humana, no habrá máquina que pueda sustituir la voz amable de «uno de nuestros agentes». De ahí que aunque crean, por costumbre, que no tienen aptitudes ni para guardar un documento en la nube, recuerden el valor que los perfiles analógicos tienen para las compañías tecnológicas. No tengan miedo.