Muere Tom Petty, leyenda del rock

La Voz DAVID VILLAFRANCA (EFE)

CULTURA

JEFF HAYNES | Reuters

Es una figura fundamental de la música gracias a discos como «Tom Petty & the Heartbreakers» (1976), «Damn the Torpedoes» (1979), «Full Moon Fever» (1989) o «Wildflowers»

03 oct 2017 . Actualizado a las 08:34 h.

Adiós a una leyenda del rock. El músico estadounidense Tom Petty ha fallecido a los 66 años después de sufrir un ataque cardíaco en su casa de Malibú (California) en la noche del domingo.

Petty murió rodeado de amigos, familiares y compañeros de su famosa banda The Heartbreakers.

La noticia del fallecimiento llegó horas después de que la Policía de Los Ángeles rectificara una información inicial de su muerte que resultó ser errónea y que había sido difundida a los medios de comunicación. El portal especializado en noticias de famosos TMZ informó que el famoso músico se encontraba inconsciente y sin respirar cuando fue asistido el domingo por la noche en su domicilio de Malibú, a unos 50 kilómetros al oeste de Los Ángeles. No obstante, los servicios de emergencia lograron que recobrara el pulso y lo trasladaron al hospital UCLA de Santa Mónica.

Canciones épicas y melancólicas

Las canciones épicas y melancólicas, la banda sonora de viajes eternos por la carretera y la música de atardeceres con sabor a victorias y derrotas convirtieron al carismático Tom Petty en un memorable guardián de las esencias del mejor rock estadounidense.

Pese a que los servicios de emergencia lograron que recuperara el pulso después de encontrarlo sin respiración e inconsciente, el roquero falleció después de que se le retiraran las medidas de soporte vital tras constatar que no tenía actividad cerebral.

De la mano de su fiel banda de acompañamiento The Heartbreakers o junto a mitos como Bob Dylan, Roy Orbison y George Harrison en el «supergrupo» The Travelling Wilburys, la trayectoria de Petty figura entre las páginas más brillantes del rock estadounidense gracias a inolvidables canciones como American Girl, Free Fallin', Wildflowers o I Won't Back Down.

Petty, que recientemente había culminado con tres conciertos en el emblemático Hollywood Bowl de Los Ángeles la gira por el 40 aniversario de su carrera musical, dijo el pasado diciembre en una entrevista para Rolling Stone que quizá este sería la última.

«Mentiría si no dijera que estoy pensando que esta podría ser la última gran gira (...). Tengo una nieta que me gustaría ver tanto como pueda. No quiero pasar mi vida en la carretera. Este tour me llevará por ahí durante cuatro meses. Con una pequeña, eso es un montón de tiempo», señaló.

Irrenunciable estilo

Petty nació el 20 de octubre de 1950 en Gainesville (Florida, EEUU) y de niño sufrió los abusos de su padre antes de dejar el instituto como adolescente para dedicarse a la música, convencido de que ése era su destino tras conocer en persona y cuando aún era un chaval al rey del rock Elvis Presley.

Sus primeros pasos, sin demasiado éxito, los dio junto al grupo Mudcrutch, en donde ya tocaban Mike Campbell y Benmont Tench, que también estarían en The Heartbreakers, la famosa banda que ha acompañado a Petty durante décadas.

Debutó en 1976 con el disco Tom Petty and The Heartbreakers, con el que enseñó las claves de su irrenunciable estilo: rock emocionante y lírico inspirado en The Byrds y Bob Dylan, y que jugaba en la misma división que Bruce Springsteen o Neil Young.

Pese a que la irrupción de los guitarrazos rebeldes del punk o el posterior éxito de los sonidos electrónicos en los años 80 no encajaban para nada con su identidad, Petty fue un artista superventas que no renunció al rock de aroma clásico y que triunfó con discos como Damn the Torpedoes (1979).

Peleas con las discográficas

Petty también se topó con el lado más turbio de la industria al enfrentarse en varias ocasiones a las discográficas, como en un recordado episodio en el que se plantó ante MCA porque la compañía quería vender su cuarto álbum al elevado precio de 9,98 dólares.

Petty amenazó entonces con emprender acciones legales y con titular el álbum 8,98 dólares, el precio habitual de los discos en esa época, pero finalmente lo nombró Hard Promises (1981) tras derrotar a la discográfica en este pulso.

Al margen de su trabajo firmado de manera conjunta con The Hearbreakers, Petty editó dos discos en solitario, Full Moon Fever (1989) y Wildflowers (1994), que destacan entre lo más sobresaliente de su legado.

Además, formó parte del grupo «all-star» del rock que fue The Travelling Wilburys, un breve pero imborrable sueño para los melómanos que incluía en su formación a Bob Dylan, Roy Orbison, George Harrison, Jeff Lynne y Petty.

Este «supergrupo» publicó en 1988 The Traveling Wilburys, Vol.1, pero la repentina muerte de Orbison ese mismo año arruinó un proyecto que sólo lanzaría un disco más, una grabación titulada extrañamente The Traveling Wilburys, Vol. 3 (1990).

Tom Petty y The Heartbreakers, cuyo último álbum fue Hypnotic Eye (2014), eran reconocidos por su apasionado directo, con el que recorrieron de cabo a rabo Estados Unidos pero que sólo se vio de manera muy esporádica en el extranjero.

En el Salón de la Fama del Rock

Petty entró en el Salón de la Fama del Rock and Roll en 2002 y este año recibió el Premio Persona del Año de la Academia de la Grabación de EE.UU. dentro de los actos previos a los Grammy.

En un comunicado remitido hoy a la revista Rolling Stone, Bob Dylan, compañero de aventuras de Petty en The Traveling Wilburys y que contó con él y con The Heartbreakers en los años 80 como banda de apoyo en la gira «True Confessions», mostró su tristeza por el fallecimiento de su amigo: «Es una noticia estremecedora y demoledora».

«Fue un gran artista, lleno de luz, un amigo, y nunca le olvidaré», aseguró Dylan.