El reto de reconstruir la industria para mejorar los sueldos

Raúl Álvarez REDACCIÓN

ACTUALIDAD

PACO RODRÍGUEZ

El sector fabril, fuente tradicional de los mejores empleos y salarios, ha perdido peso tras la recesión y su atasco lastra la convergencia de los ingresos de los hogares con la media española

10 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

En Asturias, se escandaliza Comisiones Obreras, existen 12.600 hogares sin ingresos laborales, es decir, cuyo miembros ni tienen trabajo, ni perciben prestaciones por desempleo, ni cobran pensiones. Son otra de las cicatrices que deja la crisis. No son un fenómeno nuevo, causado por la recesión, aunque sí muy agravado por los años de malas noticias económicas. Ya los había antes del 2008, pero eran solo la mitad. Lo peor es que la recuperación del empleo va muy lenta, lo que no permite hacerse ilusiones sobre una solución rápida a los problemas de esas personas. Hasta ahora, Asturias solo ha conseguido recuperar dos de cada diez empleos perdidos en el hundimiento de principios de esta década, la mitad de la media española.

El país avanza más rápido que la comunidad autónoma y esa disparidad en los ritmos se aprecia también en los salarios. La crisis ha cortado de raíz y ha dado de vuelta a la convergencia en la capacidad adquisitiva de los asturianos con la media española. El PIB per cápita, que era un 8% inferior en Asturias en el 2008, está ahora un 12,8% por debajo del español. Además, el motor de la economía y de los buenos salarios en Asturias, la industria, ha perdido cilindrada en estos años. La producción en el 2016 fue un 19,8% inferior a la de 2008 y el peso del sector en la economía regional, aunque muy relevante y similar al de las zonas más industrializadas de Europa, ha disminuido tres puntos tras la recesión.