Uno de cada cuatro senadores podrá trabajar al margen de la Cámara alta

La Voz MADRID / EUROPA PRESS

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Javier Lizon | EFE

La mayoría de quienes piden compatibilidad son del PP (46), frente a 8 del PSOE y 9 de Unidos Podemos

02 may 2017 . Actualizado a las 07:16 h.

Una cuarta parte de los senadores han recibido la autorización del Pleno del Senado para realizar actividades privadas, ya que, pese a la dedicación exclusiva que marca la ley electoral, es legal que ejerzan otros trabajos fuera de la política. El Senado terminó de revisar la solicitud de los senadores aprobando las actividades privadas de 65 parlamentarios que, además de su cargo político, realizan otra profesión.

Las principales actividades extraparlamentarias son la abogacía, que podrán desempeñar 16 señorías, y la participación en conferencias y docencia universitaria, que declaran otros 18. Numerosos senadores piden permiso para participar en tertulias, varios regentan farmacias, alguno trabaja para asociaciones sin ánimo de lucro y otros declaran explotaciones agrarias de aceitunas o naranjos. La Cámara alta permite compatibilizar distintos trabajos siempre que estas labores no tengan relación con la Administración y que no supongan un menoscabo de su dedicación en el Senado.

Todos los asuntos relacionados con las posibles incompatibilidades son analizados por la Comisión de Incompatibilidades del Senado que estudia caso por caso y después la autorización es aprobada en Pleno. Hasta seis partidos de la Cámara (PP, PSOE, Unidos Podemos, Coalición Canarias, Compromís y Partido Aragonés [PAR]) cuentan con senadores que han recibido luz verde.

El que tiene más incidencia

La mayoría de los 46 senadores, que se acogen a este régimen pertenecen al grupo mayoritario en el Senado (149 escaños), el del PP, lo que supone un 30 % del grupo. Si bien, el colectivo de Unidos Podemos es el que más incidencia tiene, ya que casi la mitad de sus miembros, 9 de 21, han recibido permiso para realizar actividades privadas.

En las filas socialistas, son 8 los senadores que podrán compatibilizar el trabajo en la Cámara con otras actividades, lo que representa el 13 % del grupo parlamentario. Tras llegar a la secretaría general del PSOE en el 2014, Pedro Sánchez propuso la renovación del régimen de incompatibilidades para «hacer efectivo el principio de dedicación exclusiva», y limitó el permiso a actividades de índole política como tertulias, conferencias o publicación de libros, que los parlamentarios realizarían sin cobrar por ello.

Los datos públicos sobre bienes y rentas de los senadores arrojan distintos casos en los que los parlamentarios pluriempleados obtienen una importante remuneración fuera de los muros del Senado. Así, el popular Miguel Ángel Cortés, senador electo por Valladolid, declara más de 100.000 euros al año por su trabajo como director de la Fundación Iberoamericana Empresarial y como administrador único de una empresa de servicios jurídicos, por lo que se convierte en el senador con los mayores ingresos por labores ajenas a la institución.