Fomento lanza el contrato para probar los prototipos antiniebla en la A-8

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

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PEPA LOSADA

Destina 7,2 millones a los proyectos, que serán elegidos en tres fases

10 mar 2018 . Actualizado a las 09:18 h.

El Ministerio de Fomento acaba de lanzar el contrato para iniciar el proceso que debe llevar a reducir o eliminar el problema de la niebla en la autovía del Cantábrico (A-8) y, en paralelo, establecer un sistema integrado de ayuda a la conducción en caso de que las fórmulas para mitigar este fenómeno meteorológico solo tengan resultados parciales. El departamento que dirige Íñigo de la Serna ha publicado ya las líneas generales de la licitación en la plataforma de contratación del Estado, con un presupuesto de 7,26 millones de euros. La mayoría de la inversión (5,44 millones) se destinará a la compra de los prototipos que serán probados en la zona más afectada por la niebla: el alto de O Fiouco, en el entorno de Mondoñedo, donde habitualmente se corta el tráfico por la densa niebla ascendente que se origina en el Cantábrico. En concreto, la financiación servirá para diseñar y construir «sistemas de aislamiento, eliminación o desplazamiento de la niebla». El resto del dinero se empleará en los modelos tecnológicos de ayuda a la conducción.

Esta compra pública es la continuación de la consulta preliminar de mercado, en la que se recibieron 26 propuestas para eliminar o reducir la niebla. Este concurso de ideas se cerró en mayo del 2016. Desde entonces solo se dio un paso en este procedimiento: el convenio con Economía suscrito el pasado 28 de septiembre para financiar el 80 % de esta etapa experimental a través de un programa de innovación de ese ministerio.

Se abre ahora un proceso de eliminación de propuestas que se desarrollará en tres fases cuya duración es incierta. En la primera habrá que demostrar la viabilidad técnica y económica de las soluciones. Las empresas o particulares que superen esta fase serán los que tendrán la oportunidad de construir los prototipos y probarlos en el tramo más afectado por la niebla. Aquí se verificará si funcionan correctamente o no y se procederá a una contratación convencional para la construcción definitiva de los prototipos.

Por el momento se desconocen los plazos para realizar las pruebas, pero lo curioso es que la participación en este contrato de compra público está abierta a todas las ofertas que cumplan con los pliegos de condiciones, aunque no se hayan presentado a la fase anterior.