El presidente se ausentó del Congreso durante la tarde, aunque hoy volverá para votar
01 jun 2018 . Actualizado a las 01:05 h.¿Dónde está Rajoy? Esa fue la gran pregunta a lo largo de toda la tarde en el Congreso. Ana Pastor, la presidenta de la Cámara Baja, suspendió el debate desde las 13.00 a las 15.00 horas para que los diputados se tomasen un descanso. Rajoy abandonó el hemiciclo un momento antes que el resto, acompañado por su equipo de seguridad, que le ayudó a llegar al otro lado del pasillo atravesando una nube cargada de periodistas y operadores de cámara, sobre los que avanzó, no sin dificultades, sin hacer ningún tipo de declaración y con un paso acelerado.
Tenía prisa por llegar al otro extremo, en donde el Gobierno dispone de un espacio reservado en donde sus integrantes suelen reunirse los días de pleno. Allí se rodeó de sus asesores de mayor confianza, entre los que se encontraban, además de varios ministros, su jefe de Gabinete, José Luis Ayllón, la secretaria de Estado de Comunicación, Carmen Martínez Castro. Las sensaciones a su llegada al debate no eran buenas, pero allí constató que la reunión paralela que la ejecutiva del PNV estaba llevando a cabo en Bilbao, en la que se decidió el futuro de España, ya había concluido, y que en su teléfono seguían sin entrar noticias. Ni buenas, ni malas. Ni un mensaje. Ni una llamada. Una pésima señal, y las caras de los colaboradores, que iban abandonado la sala, así lo reflejaban.
Rajoy permaneció atrincherado casi una hora. Después no volvió a aparecer por el Congreso. Hoy volverá para votar. ¿Dónde estaba? Se pasó casi ocho horas, hasta pasadas las 22.00, en un restaurante de la cercana calle Alcalá, por donde fueron pasando los ministros mientras seguía el pleno por televisión. Después fue a Moncloa a empezar a organizar la oposición; y, de paso, la mudanza.