El Gobierno aprobará los Presupuestos aunque esté en minoría

Francisco Balado Fontenla
fran balado MADRID / LA VOZ

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Pedro Sánchez no descarta prorrogar las cuentas del PP e insiste en agotar la legislatura

06 oct 2018 . Actualizado a las 09:05 h.

«Los Presupuestos son muy laboriosos. No es lógico ponerse a confeccionarlos sin tener garantizada su aprobación». Son palabras pronunciadas hace unos meses por un ministro de peso del anterior Gobierno. Venía a reconocer que ya contaban con el visto bueno del PNV y de los canarios a sus cuentas. Así acabó sucediendo; por supuesto, tras grandes desembolsos en estos dos territorios.

Pero en el actual Ejecutivo piensan muy distinto. La idea es llevar al Congreso el proyecto de los Presupuestos cueste lo que cueste, incluso teniendo garantizado su rechazo. Consideran que podría suponer el mejor de los carteles electorales de cara a las siguientes elecciones, y que estarían enviando un mensaje muy claro al electorado: «Esto es lo que queríamos hacer, pero no podemos, así que votadnos».

Pedro Sánchez se encontró con el primer gran escollo para sus cuentas con la capacidad de veto del Senado sobre la senda del déficit. Los socialistas trataron de suprimirla por la vía rápida esta facultad de la Cámara Alta, pero tras la negativa del Congreso ya empiezan a asumir que tendrán que presentar su proyecto con el techo de gasto de Rajoy. De todos modos, parece que esto no será un problema para continuar.

El otro gran obstáculo será articular una mayoría. Con el rechazo del PP y C's garantizado, a Sánchez no le queda otra que negociar con las mismas fuerzas que le dieron la Moncloa: Podemos y nacionalistas e independentistas vascos y catalanes.

Las negociaciones con Iglesias marchan viento en popa, aseguran. Después tocará sentarse con el PNV, que en esta legislatura es el perejil de todas las salsas. Y por último, el PDECat y ERC. El presidente catalán, Quim Torra, insistió ayer en su ultimátum para pactar un referendo a cambio del apoyo a Sánchez.

La ministra portavoz, Isabel Celaá, detalló ayer que el Ejecutivo trabajará «hasta el ultimísimo momento» de cara a su aprobación, y que «ERC y el PDECat tendrán que ser quienes determinen si este país merece tener unos Presupuestos que salven mejor su futuro, o lo contrario».

La ecuación se complica todavía más, ya que Torra no tiene el control sobre los diputados de su partido (PDECat) en Madrid, a los que les toca salir con la manguera siempre que este eleva el tono.

Si el Gobierno fracasa con los Presupuestos, quedaría todavía más debilitado, pero Moncloa sostiene que esto no supondrá el fin de la legislatura. «El presidente mantiene firme su voluntad de llevarla hasta el final», recordó ayer Celaá. Aunque los socios no opinan de igual forma. El dirigente del PNV José Antonio Suso advirtió ayer que «cuando la derrota parlamentaria es permanente», no queda «otro remedio» que convocar elecciones. Pero en Sánchez desoye la llamada a urnas tanto de aliados como de oposición, y ya piensan en prorrogar los del PP.

Celáa se queja de preguntas que ve como sentencias

La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, volvió a referirse ayer a la polémica sobre el planteamiento realizado recientemente por la vicepresidenta, Carmen Calvo, en el que deslizó la posibilidad de legislar para acotar la libertad de prensa. Celaá puntualizó que defiende a la prensa «columna de la democracia», pero denunció que algunas de las preguntas a las que se enfrenta, en lugar de ser «formuladas como tales», se convierten en «afirmaciones cual si sentencias condenatorias».