El Gobierno quiere que la Iglesia paque el IBI por sus inmuebles y se encuentra una respuesta «constructiva» del Vaticano

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Calvo asegura que seguirían exentos del pago los lugares de culto pero no otro tipo de propiedades

02 nov 2018 . Actualizado a las 16:28 h.

La expresión la ha pronunciado la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, tras el Consejo de Ministros. En la habitual rueda de prensa de los viernes Calvo ha mostrado su satisfacción por la respuesta «constructiva» que según sus palabras el ejecutivo ha recibido del Vaticano sobre el cambio de régimen fiscal de la Iglesia Católica en España y las inmatriculaciones de bienes inmuebles. Según ha señalado Calvo y recoge Europa Press,la Santa Sede habría mostrado su disposición para cooperar conjuntamente con el Gobierno en la revisión de estas materias.

El plan ahora pasa por crear un grupo de trabajo para tratar temas fiscales, como el pago del IBI por los bienes inmuebles de la Iglesia, del que ahora mismo está exenta. Calvo ha insistido en que se han encontrado «una respuesta absolutamente constructiva que vamos a materializar en grupos de trabajo comunes». «Le trasladé una preocupación del Gobierno de España para encontrar una salida que permita a la Iglesia tributar en las condiciones en las que la Iglesia católica tributa en otros países. Le trasladé que nos parecía que la formula italiana nos parecía interesante», ha señalado Calvo.

El Ejecutivo, ha proseguido Calvo, no puede tener «una pieza disonante e incoherente» en el marco de su revisión de la política fiscal, que tiene que ver con de los impuestos de una institución tan importante que «dispone de tantos inmuebles y recursos» en España. Sobre su interlocutor, el cardenal Parolin, la vicepresidenta ha explicado que le pareció «absolutamente coherente» su planteamiento, que es «completamente necesario» por parte de la Iglesia católica ponerse a trabajar en esta dimensión. Así, ha explicado que el criterio actual podría mantenerse en los espacios dedicados al culto, pero no en otros espacios o actividades donde la Iglesia Católica debe ayudar al Estado del Bienestar, a la igualdad, a los servicios públicos y a los derechos».

En la misma línea, Calvo también ha contado que trasladó al cardenal la necesidad de reflexionar sobre las inmatriculaciones de la Iglesia, especialmente, desde la vía implantada por el Gobierno de José María Aznar que, a juicio del Ejecutivo de Sánchez es «discutiblemente» constitucional. «Encontré una respuesta constructiva de trabajo común en la que pudiéramos hacer una revisión de esta circunstancia que para este gobierno es también extraordinariamente importante», ha asegurado. Además, ha añadido que hay «singularidades» en las que habrá que hacer un capítulo aparte para intentar encontrar «salidas positivas» que, respetando los monumentos y el culto, respondan también a las aspiraciones legítimas de los ciudadanos y del patrimonio.