Se bate el récord de registrados, pero la tradición apunta a una baja participación
06 nov 2018 . Actualizado a las 08:01 h.El voto hispano podría ser decisivo en las elecciones legislativas que hoy se celebran en Estados Unidos. Sin embargo, y a pesar de que se haya contabilizado un récord de 29 millones de hispanos registrados para votar, expertos y analistas subrayaron en las últimas horas que se espera que solo un cuarto de ellos acudan a las urnas.
A pesar de la insistencia de Donald Trump en cargar contra este colectivo, azuzando con frecuencia a sus bases dentro de una estrategia antiinmigración, el voto latino sigue siendo un enigma. Conviene recordar que, aunque el presidente de EE.UU. aglutina el rechazo mayoritario de la comunidad hispana, casi el 30 % de los votantes latinos lo apoyaron en 2016, unos comicios donde además cayó la participación de este colectivo.
En aquel entonces, el magnate habló de los inmigrantes ilegales como «serpientes venenosas, narcotraficantes o violadores». Exactamente los mismos términos con los que se ha referido durante las últimas semanas a la caravana de inmigrantes que avanza por territorio mexicano con destino a EE.UU.
Una encuesta publicada recientemente por The Wall Street Journal reflejaba que los hispanos constituyen uno de los colectivos menos interesados en las midterms, únicamente por detrás de los jóvenes. Esta es la razón por la que, a pesar de que existe una mayor movilización, la habitual falta de interés podría acabar por imponerse a lo largo de hoy.
Desgana política
Esta tendencia a la alta abstención explica, por ejemplo, que republicanos y demócratas no hayan invertido apenas en campañas destinadas a conquistar el voto latino. Un estudio de la organización Latino Decisions reflejaba que el 63 % de los hispanos registrados para votar se muestran interesados en ejercer su derecho al sufragio, pero por lo menos la mitad no fue contactada por alguno de los candidatos de su distrito. «Cada vez que hay elecciones se cumple la tendencia de que aquellos votantes que son contactados son más propensos a votar», explicó el analista David Ayón.
Uno de los campos de batalla electoral clave en la pugna entre demócratas y republicanos será Florida, donde cubanos y puertorriqueños moldean el panorama político. Los primeros, con la esperanza de que Trump se enfrente con mano dura al Gobierno cubano y acabe con la dictadura comunista instaurada por los Castro. Y los segundos, empujados por el enfado tras la respuesta que el Ejecutivo tuvo en la isla para atender los daños causados por el paso del devastador huracán María. Además, las mujeres latinas han sido animadas a participar en esta batalla por populares actrices conocidas, como Eva Longoria, Gina Rodríguez o Zoe Saldaña, que invocaron al voto femenino latino para que «marque la diferencia».
