El nuevo etiquetado de los alimentos anunciado por el Gobierno indigna al sector del aceite

o. t. MADRID / EFE

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VITOR MEJUTO

La etiqueta podría exclusivamente al alto poder calórico sin tener en cuenta otras propiedades beneficiosas

17 nov 2018 . Actualizado a las 09:54 h.

«Disparate» y «aberración» son dos de los calificativos utilizados por representantes del sector del aceite español para calificar el etiquetado nutricional Nutriscore, que impulsa el Ministerio de Sanidad. Sus críticas provienen del hecho de que este modelo podría colocar mala nota a este producto por su alto valor calórico.

El anuncio realizado el lunes por Sanidad ha generado polémica en el sector alimentario, y muy especialmente entre los productores de aceite, ya que en función de los baremos que utilice este sistema puede darse el caso de que algún refresco bajo en calorías obtenga mejor puntuación que una botella de virgen extra.

Desde la patronal de envasadores de aceites (Anierac), su director, Primitivo Fernández, reconoció el «revuelo» generado en el sector por una cuestión que ha llegado «por sorpresa».

«No teníamos previsto nada de nada», señaló Fernández, quien se mostró confiado en poder resolver las dudas que provoca el sistema en el marco de las conversaciones que espera que mantenga Sanidad con expertos, consumidores y sectores industriales antes de regular legalmente este nuevo etiquetado nutricional.

El director de Anierac puso como ejemplo el caso de Francia, donde realizaron un estudio exhaustivo con consumidores antes de apostar por el Nutriscore (en 2017), además de aplicar «adaptaciones puntuales» en algunos productos como bebidas, quesos y grasas.

«No es el modelo óptimo»

No son los únicos que opinan que el Nutri-Score no es el modelo más óptimo. Aunque manifestaron su total colaboración con cualquier idea que contribuya a que los ciudadanos tengan una mejor información nutricional, la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición explicó en un comunicado que «este método de etiquetado quizás no es el óptimo, ya que puede generar cierta confusión entre los consumidores, especialmente si la elección del alimento se basa únicamente en este código de colores». En este sentido, añaden, «es fundamental seguir educando a la población en materias de alimentación».

El miembro del área de Nutrición de este colectivo, Miguel Ángel Martínez Olmos, apuntó que las medidas anunciadas por el Gobierno son algo «muy positivo siempre y cuando se lleven a la práctica de una forma real». Y añadió que resultaría «imprescindible que haya contenidos obligatorios en los currículos escolares».