Aurelio Martín y Ovidio Zapico miran hacia el modelo de la «Medusa» coruñesa o el puerto de Santander para resolver el problema medioambiental que generan los tráficos de carbón
28 mar 2017 . Actualizado a las 13:37 h.Un puerto con buenos resultados económicos, con un movimiento récord de graneles sólidos -carbón, principalmente- y con unas expectativas de crecimiento de este último tipo de tráficos, pero con «una terminal granelera con procedimientos de carga, descarga y almacenamiento del siglo pasado»: un desfase «paradójico e incomprensible» que, según Izquierda Unida, genera un «impacto negativo sobre el medio ambiente», sobre todo en la zona Oeste de Gijón. Es el diagnóstico que hoy han presentado en el ayuntamiento de Gijón el portavoz municipal del grupo, Aurelio Martín, y el diputado por la formación Ovidio Zapico, que también han presentado dos posibles soluciones inspiradas en puertos «cercanos y similares»: A Coruña y Santander. En ambos, la opción ha sido la de cubrir toda la zona afectada por el manejo de carbón, tanto las superficies de almacenamiento como las cintas de transporte; una medida que se ha adoptado incluso «en países menos desarrollados» y que excede con mucho, para IU, las previsiones «necesarias, pero insuficientes» de la Autoridad Portuaria al respecto.
Por ello, Martín y Zapico han anunciado una iniciativa conjunta para solicitar a los representantes locales y autonómicos en el consejo de administración portuario que sean «exigentes» para solicitar un «mejor manejo e instalaciones» de los graneles, y el carbón muy en particular, con el «compromiso concreto» de «proyectos, presupuestos y plazos de ejecución» por parte de los responsables del Musel. Todo ello, en prevención de fenómenos como la decena de nubes de polvo de carbón que -ha recordado Martín- afectaron a los barrios del Oeste gijonés. El asfaltado y sistemas de cobertura como los que ejemplifican A Coruña -con su espectacular «Medusa»- y Santander impedirían la propagación de partículas PM10 (de menos de 10 micras) que «son nocivas para la salud» en concentraciones como las que se generan en las nubes de polvo, según el portavoz de IU.
Para Martín, situación es «paradójica e incomprensible» si se la confronta con los datos macroeconómicos de El Musel: 18,9 millones de toneladas de graneles en 2015 (la mitad de ellas de carbón), que le dan el liderazgo en este tipo de gráficos; un crecimiento del 7,2% en dicha actividad; ganancias de 1 millón de euros por parte del puerto y de 2 millones para la EBHI, concesionaria de la gestión de los graneles, y una previsión, por parte de esta última empresa estatal, de ampliar hasta un 10% las 15 hectáreas de superficie en las que opera
«Hay mucho margen de mejora», ha añadido Ovidio Zapico, que considera las Autorizaciones Ambientales Integradas que concede la administración autonómica como un elemento para aproximarse a la propuesta de IU. Además, el diputado ha advertido de que El Musel debe adoptar estas medidas para adelantarse a la «revolución» en los tráficos que se producirá en la próxima década con el deshielo del Paso del Noroeste y el incremento de buques procedentes de Asia: 7.500 de atajo «con Gijón con uno de los primeros puertos que encontrarán a su llegada a Europa», según el diputado de IU.