Los implicados en la adquisición de carbón de importación con dinero de ayudas públicas tendrán que abonar 16 millones cada uno y otros 16 de forma solidaria
29 dic 2017 . Actualizado a las 14:37 h.El segundo juicio por el cobro ilegal de subvenciones al carbón en la mina gijonesa de La Camocha ya tiene sentencia. El Juzgado de lo Penal número 2 de Gijón ha condenado a penas que oscilan entre los 4 años y dos meses y los 7 años y medio de cárcel, así como al pago de multas individuales que suman 16 millones de euros, a tres de los acusados por un fraude que la sentencia da por probado que se produjo entre los años 1998 y 2000. Así, El expresidente de Mina La Camocha Manuel Martín Martín ha sido condenado a siete años y medio de cárcel, y el exapoderado de Hullas de Coto Quirós Guillermo Alfredo Honrubia y el exadministrador único de esta última Ángel García Brugos, a cinco años y tres meses de prisión. La sentencia, que reconoce la atenuante de dilaciones indebidas, les impone además a cada uno de ellos una multa individual de 16,1 millones de euros por el importe defraudado, así como el pago de manera conjunta y solidaria de una indemnización al Estado en concepto de responsabilidad civil de otros 16,1 millones, y la inhabilitación para la obtención de subvenciones o ayudas públicas. La excontable de La Camocha Margarita García ha sido absuelta de los tres delitos contra la Hacienda Pública que se le imputaban. La Fiscalía pedía penas de 9 años de cárcel para los cuatro acusados, las mismas que les fueron impuestas en un primer juicio, anulado. Ahora se abre la posibilidad de recurso.
La causa se puso en marcha a raíz de una investigación fue impulsada por la Fiscalía Anticorrupción después de que la Guardia Civil detectara el movimiento de carbón importado desde el Puerto de El Musel hasta Mina La Camocha, en 1999, y su supuesta venta a las térmicas como nacional para cobrar las subvenciones establecidas para el producto autóctono. La sentencia considera probado que, «con la finalidad de obtener un beneficio económico injusto», los ahora condenados procedieron a alterar el destino de las ayudas públicas», para lo cual desviaron parte de las ayudas que estaban destinadas a la producción propia, a la «adquisición de carbón a terceros».
A través de Hullas de Coto Quirós, que posteriormente facturaba a la mina gijonesa por otros conceptos como prestación de servicios o alquiler de maquinaria, La Camocha se hacía con carbón de importación que hacía pasar como propio. Así, el carbón comprado era mezclado con el extraído en la explotación de Gijón y entregado a la Central Térmica de Aboño simulando cumplir el contrato de suministro concertado para el carbón nacional. La cuantía total de carbón ajeno que Mina La Camocha entregó a Hidroeléctrica del Cantábrico como si fuera de producción propia ascendió a 98.686 toneladas. En aquellos años la tonelada de carbón de importación costaba unos 45 euros mientras que el valor medio de las ayudas correspondientes a la hulla autóctona que recibió por tonelada durante esos tres años fue de 189,88 euros; unas ayudas que habían sido concedidas para cumplir el plan de modernización y racionalización del sector basado en la reducción paulatina de la producción
La Audiencia Provincial había anulado un primer fallo de 2014 por falta de imparcialidad, y ordenado la celebración de una segunda vista oral, que se desarrolló entre los pasados meses de mayo y julio. En aquella primera sentencia fueron condenados a nueve años de cárcel estas cuatro personas, así como el exconsejero de Industria del Gobierno asturiano y exapoderado de la Mina La Camocha, Víctor Zapico, fallecido antes de la celebración del segundo juicio.