La mafia calabresa logra infiltrarse en el sistema de acogida de migrantes italiano

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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ALFONSO DI VINCENZO | AFP

Un total de 68 personas, entre ellas un cura y miembros de la Ndrangheta, fueron detenidos por enriquecerse con la gestión del centro de acogida de Calabria

16 may 2017 . Actualizado a las 14:05 h.

La conclusión es que la mafia ha conseguido infiltrarse en el sistema de acogida de inmigrantes y convertirlo en un negocio lucrativo. Un total de 68 personas, entre ellas un cura y miembros de la Ndrangheta calabresa, fueron detenidos ayer por enriquecerse con la gestión del que está considerado el centro de acogida de inmigrantes más grande de Europa, en Calabria.

Los arrestos se produjeron durante una operación que tenía por fin desmantelar el clan «Arena» de la mafia calabresa, considerada la de mayor poder en Italia. Los detenidos han sido acusados de asociación mafiosa, extorsión, tenencia ilícita de armas, alzamiento de bienes, malversación de fondos estatales, estafa agravada, fraude en instalaciones públicas y otros delitos de naturaleza fiscal, agravados por el modo mafioso.

Según la investigación, el clan gestionaba el Centro de Acogida para Solicitantes de Asilo (CARA, en italiano) del municipio calabrés de Isola Capo Rizzuto, que con sus cinco hectáreas es considerado el más grande de Europa. Contaba con colaboración de los gestores del centro, el presidente de la Confraternidad de las Misericordias en Calabria, y el párroco del municipio, ambos detenidos.

Los mafiosos creaban empresas para concurrir en las licitaciones públicas y adjudicarse servicios ofrecidos en el centro, en concreto los de restauración y lavandería, unas contratas que además eran subvencionadas con fondos europeos. De este modo, de los 103 millones de euros de fondos europeos que el Estado italiano destinó entre 2006 y 2015 al centro, 36 millones acabaron en los bolsillos del clan. El fiscal señaló que sobre todo se lucraban del reparto de comida. «Si, por ejemplo, la empresa debía repartir 500 menús, solo daban 300 y el resto no comían».Con los beneficios la mafia adquiría teatros, cines, barcos, apartamentos o yates de lujo.