Un escándalo de acoso sexual deja a May sin un ministro clave

Rita A. Tudela LONDRES / E. LA VOZ

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PETER NICHOLLS | Reuters

El titular de Defensa dimite tras reconocer conducta inapropiada

02 nov 2017 . Actualizado a las 07:32 h.

Los escándalos sobre acoso sexual en el Reino Unido han llegado al Gabinete de Theresa May y dejan a la premier sin uno de sus miembros claves en la lucha que mantiene contra los críticos liderados por Boris Johnson. El ministro de Defensa, Michael Fallon, presentó ayer su dimisión tras admitir esta semana una conducta inapropiada en el pasado con una periodista. Desde hace tiempo, May proyecta una remodelación de Gobierno para deshacerse de los que cuestionan su liderazgo y sus negociaciones sobre el brexit. La dimisión de Fallon es la excusa perfecta para acometer la tarea, sobre todo ahora que se queda sin uno de sus apoyos dentro del gabinete en una importante cartera. 

En una carta a la premier, Fallon reconoce que su «comportamiento del pasado» no está a la altura de los estándares exigidos a los miembros de las Fuerzas Armadas británicas y, por ello, ha decidido abandonar el cargo, aunque seguiría siendo diputado.

Fallon agradece el «privilegio» de haber dirigido el ministerio durante este período. «Estamos cerca de derrotar el terrorismo de Daesh [Estado Islámico] en Irak y Siria. Hemos adquirido un papel de liderazgo en la OTAN y hemos logrado asegurar un presupuesto de Defensa que crecerá por delante de la inflación cada año», señaló. May respondió con otra misiva, en la que le reconoció «el particular ejemplo que desea dar» con su decisión. «Dios mío. Sir Michael Fallon acaba de dimitir», tuiteó la periodista detrás de la acusación, Julia Hartley-Brewer, añadiendo: «Aunque dudo que la razón sea mi rodilla». Esta semana salió a la luz que, durante una cena en el congreso del Partido Conservador del 2002, Fallon le tocó la rodilla a Julia Hartley-Brewer. Fallon ya aclaró que «se disculpó cuando ocurrió el incidente, y ahora los dos consideran que es un tema zanjado».

Es la primera víctima de las denuncias de acoso sexual que afronta la élite política británica desde que estalló el escándalo del productor Weinstein, entre ellos varios cargos, como el viceprimer ministro Damian Green.

Toby Melville | Reuters

Londres investiga si la campaña a favor del «brexit» contó con ayuda financiera rusa

La Comisión Electoral británica está investigando si el magnate Arron Banks, principal donante de la campaña a favor del brexit puesta en marcha por el euroescéptico UKIP en el referendo de junio del 2016, rompió las reglas al usar dinero procedente de Rusia, puesto que la ley solo permite donaciones llegadas de suelo británico y Gibraltar. Banks, quien donó seis millones de libras a la campaña, convirtiéndose en una de las más cuantiosas de la historia electoral británica, respondió a la apertura de la investigación negando las acusaciones en un comunicado y tildándola de «chorrada». 

Si bien para la comisión hay «motivos razonables» para creer que se cometieron delitos en las donaciones hechas a la campaña del Leave EU (favorable a la salida), el magnate de seguros contraataca pidiendo que un juez lidere la investigación «para aclarar esta tontería de una vez por todas» y niega que sus reuniones con el embajador ruso tengan relación alguna con la cuantiosa donación.

Banks, el millonario

Para Banks, la Comisión Electoral no está a la altura para hacer este trabajo, pues se compone de representantes de todos los partidos políticos y de miembros favorables a seguir en la UE, por lo que reprocha que «una vez más tratando de desacreditar el resultado y todo empieza a ser bastante aburrido». Su nombre apareció en la lista de los hombres más ricos que elabora el Sunday Times por primera vez este año, con una fortuna estimada en 250 millones de libras, gran parte de la cual procede de Eldon, una de sus compañías de seguros.

Las primeras recopilaciones de la comisión apuntan a que otra de sus empresas, Better for the Country Ltd (BFTC, por sus siglas en inglés) hizo donaciones por un total de 2,4 millones de libras en el referendo, mientras que Banks habría hecho otra en su propio nombre por un total de 6 millones de libras. La investigación tratará ahora de aclarar si el millonario fue realmente la «verdadera fuente de las donaciones» o si actúo como agente en nombre de otro donante, así como los pasos que tomaron los destinatarios para verificar la identidad de la donación.