Columbine grita «no a las armas» 19 años después

Adriana Rey NUEVA YORK / CORRESPONSAL

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La masacre ocurrida en abril de 1999 se convirtió en un símbolo de la violencia armada en los colegios estadounidenses

21 abr 2018 . Actualizado a las 09:11 h.

Diecinueve años después, el recuerdo de aquel día duele como si hubiese ocurrido ayer. «Apoya la seguridad escolar», rezaba una de las miles de pancartas que volvieron a desfilar por las calles de EE.UU. Fueron cientos de estudiantes los que emocionados, alzaron sus voces contra la violencia armada en las escuelas aunque esta vez en conmemoración a las trece personas asesinadas en el tiroteo de Columbine High School, en Littleton, Colorado, un 20 de abril de 1999. Aquella masacre dinamizó el debate sobre el control de armas y se convirtió en un símbolo de la violencia armada en los colegios estadounidenses, una violencia que lamentablemente ha continuado en los años posteriores a este tiroteo. Los estudiantes en huelga (muchos de los cuales ni siquiera habían nacido cuando ocurrió dicho tiroteo) representaron este viernes a más de 2.600 escuelas que guardaron un minuto de silencio por todas las víctimas de la violencia armada en los centros educativos y trece segundos por cada uno de los fallecidos en la escuela de Littleton. «¡Ni uno más!», gritaron los estudiantes concentrados en Washington D.C. impulsados por el movimiento Never Again surgido tras la masacre de Parkland. «¡El Congreso no hace su trabajo!», denunciaron frente a la Casa Blanca para después desfilar hasta el Capitolio, donde demandaron nuevas leyes de control de armas.

Las protestas acapararon especial atención en el norte de Florida, donde una hora antes de dar comienzo la huelga nacional un estudiante resultaba herido de bala en un tobillo, tras un tiroteo registrado en el colegio Forest High School de la ciudad de Ocala. El incidente volvió a poner la lupa sobre las leyes de armas en este estado, uno de los más permisivos en cuanto al acceso a pistolas y escopetas se refiere y donde no se exige ni un permiso ni una licencia para que alguien pueda poseer una. Tras el tiroteo de Parkland y la consecuente presión estudiantil, el Senado de Florida aprobó un proyecto de ley que aumentaría la edad mínima para comprar un arma de fuego de los 18 a los 21 años.