Erdogan se hace con el control absoluto

Patricia Alonso ESTAMBUL / E. LA VOZ

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GORAN TOMASEVIC | Reuters

El veterano líder islamista es reelegido por amplia mayoría, pese a las protestas de la oposición, y consigue afianzar en Turquía el régimen presidencialista

25 jun 2018 . Actualizado a las 08:08 h.

Recep Tayyip Erdogan dio este domingo el paso que le falta en el camino que él mismo diseñó para transformar Turquía en un sistema presidencialista y arrogarse todo el poder. El líder islamista, de 64 años, logró la reelección en primera vuelta en las presidenciales y además tendrá el apoyo del Parlamento, ya que la coalición liderada por el Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) obtuvo la mayoría de escaños.

Erdogan se declaró anoche vencedor sin esperar a que el Consejo Electoral ratificara los resultados difundidos por la agencia de noticias estatal Anatolia. «Según los resultados no oficiales, la nación me ha dado el mandato de presidente», reconoció. «Espero que nadie intente manchar las elecciones para encubrir su fracaso», añadió, en referencia a las denuncias de la oposición, que acusa a Anadolu de manipular los resultados mientras pedía a la población que no perdiera la esperanza. La segunda vuelta entre Erdogan y el socialdemócrata Muharrem Ince que pronosticaban los sondeos no tuvo lugar.

El opositor Partido Republicano del Pueblo (CHP) se resistía a reconocer su derrota y no tardó en poner sobre la mesa denuncias de fraude. La desolación se adueñó de esa parte del país que esperaba que esta vez algo cambiase y que participó de manera masiva en los mítines de la oposición. Mientras, en las calles de Estambul los fieles a Erdogan hacían sonar los cláxons para celebrar el ansiado triunfo.

La coalición entre el AKP y los nacionalistas del MHP logran la mayoría absoluta con un 53 % de los votos. «No tiene sentido», comentaba un ciudadano turco. «Según esto el MHP obtiene un 11 % de los votos, casi igual que en el 2015, a pesar de que el partido se ha fracturado», añadía en referencia a la salida de Meral Aksener, fundadora del Iyi Parti.

El partido prokurdo HDP, cuyo líder Selahattin Demirtas afrontó las elecciones desde la cárcel acusado de terrorismo, obtendría más del 10 % mínimo para tener representación en la cámara.

El 85 % participación marcó un récord. Los turcos se volcaron con la cita electoral y demostraron que siguen creyendo en el valor de su voto, a pesar de que desde primera hora de la mañana se sucedieron informaciones sobre irregularidades y altercados en los diferentes colegios electorales del país, que se saldaron con al menos tres muertos, incluyendo un representante local del Iyi Parti en el este de Turquía.

Varios frentes abiertos

El país vive en estado de emergencia y está cada vez más polarizado, pero la Turquía de Erdogan responde una y otra vez a los llamamientos de su líder y lo hace con disciplina marcial, informa Colpisa. Turquía que respalda a un presidente que tiene la mesa cargada de frentes abiertos. Durante la campaña Erdogan dio muestras de cansancio, pero con el resultado de estas elecciones obtiene el respaldo que le faltó tras el referendo del año pasado, en el que su apuesta por el cambio a un sistema presidencialista obtuvo una victoria ajustadísima. Arranca una nueva era para Turquía, pero lo hace sin cambio de caras.

Un presidente clave en el tablero global con mando hasta el año 2033

La comunidad internacional siguió con interés una cita con las urnas en Turquía. Empañada por varios episodios de violencia y acusaciones de fraude, y rodeada de polémica por ser la primera del nuevo sistema presidencialista aprobado en el referendo de mayo del 2017. El nuevo régimen ha sido muy criticado por aglutinar en un cargo todo el poder, permitiendo al presidente gobernar a base de decretos sin contar con el Parlamento. Con su victoria de este domingo, el reis Erdogan podrá seguir gobernando Turquía a su antojo hasta el 2033.

¿Por qué es tan importante quién gobierne Turquía? Este país cuenta con el segundo ejército más grande la OTAN, y su situación geoestratégica es de vital importancia. Situado entre Oriente y Occidente, comparte fronteras con Siria, Irak e Irán, y juega un papel muy importante en el mundo musulmán. A nivel europeo, sigue siendo candidato a entrar en el bloque comunitario, y desde el 2016 mantiene un acuerdo con Bruselas para detener la llegada de refugiado a las fronteras de Europa.

Según el analista Xavier Palacios, las elecciones de este domingo marcarán un antes y un después. «Un cambio de presidente hubiera significado un cambio de la política turca en Siria, lo que afectaría a sus relaciones con Rusia», apunta, en relación al creciente acercamiento entre Putin y Erdogan y que mantiene en vilo a otros miembros de la OTAN.

Palacios destaca que para cualquier presidente o líder europeo, resultaría mucho más fácil reunirse y dialogar con otro candidato que con Erdogan, «por todo lo que supone a nivel de derechos humanos». Sin embargo, el analista advierte que las políticas del CHP o el Iyi Parti en Chipre no son muy diferentes de las del AKP, por lo que las relaciones con Bruselas se mantendría en la misma línea.