Al menos 40 sepultados en un pueblo tras el paso de Mangkhut por Filipinas

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

ACTUALIDAD

HARLINGTON PALANGCHAO | Reuters

En EE.UU. las inundaciones aíslan Wilmington del resto de Carolina del Norte

18 sep 2018 . Actualizado a las 07:16 h.

Filipinas se afanaba este lunes en recuperar del lodo los cuerpos sepultados por un alud de tierra en un pueblo minero provocado por el tifón Mangkhut. El paso del destructor ciclón por la isla filipina de Luzón deja un balance de 66 muertos. Unas 35 personas perecieron en el pueblo minero de Itogon, provincia de Benguet, pero, según las autoridades hay todavía atrapadas otras 40, aunque vecinos de la zona aseguran que la cifra supera el centenar.

El barro no solo enterró la mina, sino también cuatro barracones donde vivían los mineros y sus familias de manera ilegal, por lo que es difícil conocer con exactitud la cifra potencial de víctimas. Dos hombres lograron escapar del desastre arrastrándose por un túnel de la mina, que era explotaba ilegalmente a pequeña escala tras ser cerrada hace casi diez años.

La región más golpeada por Mangkhut ha sido Cordillera, donde se han confirmado 54 fallecidos, la mayoría de ellos por avalanchas de tierra. Además, 43 personas siguen desaparecidas, y más de 155.000 se encuentran en centros de evacuación, dos días después del paso del tifón.

A las pérdidas humanas hay que añadir las materiales. Una estimación preliminar de los daños en infraestructuras supera los 203 millones de dólares (174 millones de euros), señaló a AFP el portavoz presidencial, Harry Roque. Cuatro provincias han sido declaradas en estado de calamidad ante la gravedad de los daños. A solo un mes de la cosecha, se ha perdido en Luzón una parte importante de la producción de arroz y maíz del país.

Mientras Hong Kong intenta a ayer volver a la normalidad tras el paso del tifón. Los operarios retiraban árboles y materiales que se desprendieron de los edificios, andamios y grúas.

En cuanto a la depresión tropical Florence que azota la coste este de Estados Unidos, aunque se ha debilitado, continúa la amenaza de «inundaciones repentinas» en partes de las dos Carolina y parte de Virginia, Maryland, Pensilvania, Nueva York y Nueva Inglaterra. La ciudad costera de Wilmington, Carolina del Norte, ha quedado aislada del resto del estado debido a las inundaciones.

El presidente Donald Trump declaró este lunes el estado de emergencia en Carolina del Sur ante la devastación y las fuertes inundaciones causadas por la tormenta Florence, que se ha cobrado 18 vidas. El último de los cuerpos recuperados, según fuentes policiales, es el de Kaiden Lee-Welch, un bebé de apenas un año de edad que se encontraba en paradero desconocido desde el domingo, cuando el coche en el que viajaba con su madre fue arrastrado por la corriente. Cientos de miles de personas están fuera de sus hogares y unos 500.000 usuarios se encuentran sin electricidad en la región afectada.

Nigeria, cien muertos

Más de un centenar de personas han muerto en Nigeria por las fuertes lluvias caídas las últimas dos semanas, que han provocado desbordamiento de ríos y han arrasado comunidades enteras.

La situación está «empeorando», ya que los niveles de los ríos y las inundaciones siguen creciendo, dijo a Efe el portavoz de la Agencia Nacional de Gestión de Emergencias, Sani Datti. Los terribles daños se deben a varios factores, entre los que figura la precaria planificación urbana con casas cercanas a lo ríos, pocos sistemas de drenado y la descarga de presas situadas en Camerún.