La mayoría de personas no sabe muy bien en qué consiste este invento y, por este motivo, genera dudas su uso
03 jul 2020 . Actualizado a las 12:57 h.El colmo en automoción son los coches de conducción autónoma. Un futuro que nos pintaban las películas de ciencia ficción y que ya tenemos a las puertas. No obstante, no parecemos muy entusiasmados ante la idea de dejarnos llevar por una máquina. Así, en una encuesta realizada en EE.UU., un 48 % aseguró que nunca se subiría a un taxi o a un vehículo compartido que se impulsará de forma autónoma.
Por su parte, un 21 % declaró recelar de esta opción, mientras que un 20 % está convencido de que esta clase de vehículos nunca serán seguros y, finalmente, solo una de cada tres personas encuestadas respondió que las ventajas de estos automóviles acabarán ganando la partida a las desventajas.
En opinión de los impulsores de la encuesta, el sondeo ha revelado una realidad evidente: la falta de conocimiento acerca de los vehículos autónomos. Por lo tanto, quizás sea preciso evangelizar un poco más acerca de esta invención que trastocará nuestra forma de desplazarnos ya que incluso detalles como los seguros de coche necesitarán reinventarse.
Así, ¿sabías que existen cinco niveles de conducción autónoma?
- El nivel 0 es el punto de partida y es la conducción en la que el conductor se ocupa de todas las tareas del coche, incluso aparcar.
- El nivel 1 lo conforman aquellos modelos de coche en los que encontramos asistentes como la alerta de cambio involuntario de carril, el control de velocidad de crucero o sistemas de frenada automática. Es decir, el coche realiza acciones ya por sí solo.
- El nivel 2 en el que en ciertas tareas, como al aparcamiento, el vehículo controla el volante y los pedales para estacionar el coche.
- El nivel 3 de automatización en el que el automóvil es capaz de relevar al conductor en ciertas acciones pues pueden analizar el entorno y actuar en consecuencia. De esta manera, asumen el control durante un trayecto por la carretera, pero el conductor debe permanecer atento e intervenir si fuera necesario.
- El nivel 4 en el que encontramos coches cuyo conductor tan solo tiene que preocuparse por indicar el lugar de destino, pero en cualquier momento puede recuperar el gobierno del automóvil si así lo quisiera.
- El nivel 5, el paradigma del coche automático en el que ya no encontramos ni pedales ni volantes. El conductor humano desaparece y pasa a convertirse en un mero pasajero.
A día de hoy, únicamente contamos con automóviles correspondientes al nivel 4, como el coche autónomo de Google o Tesla. ¿Y podremos verlos pronto por nuestras carreteras? Pues dependiendo del país. En 2017, Alemania aprobó la posibilidad de que los vehículos puedan circular en modo autónomo, pero siempre que dispongan de un conductor a bordo. China es otro de esos osados países que parecen más que dispuestos a abrazar la causa de los coches autónomos, pues cuenta con el servicio de los ‘robotaxis’. Lo cierto es que los fabricantes de coches autónomos están convencidos de tener entre sus manos un tipo de coche que, con el tiempo, destacará por un estándar de seguridad sobrehumano. No en vano, están persuadidos de que cuando la conducción independiente se expanda, el número de accidentes de tráfico se reducirá drásticamente.