Han dejado de ser una guarnición o una obligación saludable para adquirir el protagonismo de un plato sabroso, rápido de preparar y muy práctico para comer al aire libre

Si al hablar de ensaladas solo piensas en lechuga, es posible que te hayas quedado gastronómicamente desfasado. Las ensaladas han dejado de ser una guarnición aburrida para convertirse en un plato con protagonismo, lleno de alternativas, exquisito para el paladar y para el estómago. Junto con la lechuga aparecen legumbres, vegetales, pastas o arroces. Además, cumplen con las recomendaciones de los expertos en nutrición que invitan a aprovechar la variedad de alimentos a nuestro alcance, fomentando el consumo local y la cocina de aprovechamiento. La teoría, por tanto, está clara. Pero si aún necesitas un empujón práctico, qué te parece si te proponemos siete recetas, una para cada día de la semana. Para no repetir ni aburrirte. Son una buena base para que tú experimentes. 

Ensalada fresca de lentejas. Estas legumbres tienen vida más allá de los potajes. Escurres 150 gramos de lentejas de bote y las enjuagas bajo el grifo con agua fría. Cortas una zanahoria, un tomate, un pimiento rojo, media cebolla y un cuarto de aguacate en cubos pequeños y los mezclas con las lentejas. Desgranas 40 gramos de queso de cabra y lo añades. Agregas unas hojas de cilantro -o de la hierba que prefieras- y lo aliñas con una cucharada sopera de aceite de oliva virgen extra, el zumo de media lima y una pizca de sal.

Ensalada César. ¿Sabías que esta popular ensalada nació en México? Fríes unos trozos de pan duro como picatostes y preparas la sala César. Lo primero será picar el ajo y cuatro filetes de anchoa y exprimir un limón. Machacas el ajo con un poco de sal gorda y cuando quede como una pasta, añades las anchoas y sigues machacando. Cuando esa pasta sea homogénea, riegas con el zumo de limón. Incorporas un poco de mostaza, dos yemas de huevo y un chorro de salsa perrins. Mezclas todos los ingredientes hasta que estén bien integrados y añades el aceite de oliva virgen extra poco a poco, hasta que adquiera la consistencia de una mayonesa. Luego solo queda hacer a la plancha unas pechugas de pollo que cortarás en tiras y mezclarás con la lechuga, 100 gramos de queso parmesano, una pizca de ajo en polvo, otra de pimienta negra y sal. Finalmente, coronarás el plato con la salsa y los picatostes.

Ensalada de arroz integral tropical. Refrescante y sugerente. Colocas cuatro tazas de arroz integral cocido en un bol y añades un mango, media papaya, dos rodajas de piña y un aguacate grande troceados en cubitos. Incorporas dos latas de atún al natural y dos chiles rojos picados. Aderezas con el zumo de dos limas, seis cucharadas de aceite de oliva virgen extra y sal y pimienta. Puedes servirla con una base de rúcula y canónigos. 

Ensaladilla de garbanzos. Sirve incluso para rellenar un buen pan y hacer un bocadillo. ¿Te atreves? Coloca 400 gramos de garbanzos cocidos en un bol y machácalos con un tenedor. Dejar algunos enteros para que aporten textura. Añades una zanahoria grande, dos ramas de apio y media cebolla picados finos, además de 125 gramos de queso crema ligero. Aliñas con la ralladura de medio limón, una cucharadita de mostaza, otra de ajo en polvo, junto con sal y pimienta. Remueves bien y lo dejas reposando en la nevera hasta el momento de servir.

Ensalada de encurtidos con huevas de merluza. Para los amantes del sabor amargo. Picamos los encurtidos: un bote de cebollitas con sabor anchoa, uno pequeño de pepinillos y medio bote de alcaparras. Abrimos una lata de huevas de merluza y echamos el aceite en un bol. Al aceite le añades un huevo, lo bates sin levantar la batidora y añades un poco más de aceite, si fuese necesario; una pizca de sal y unas gotas de limón hasta obtener una mayonesa. Lo reservas. En un bol pones canónigos y brotes verdes. Encima, los encurtidos picados y unas frambuesas. Añades las huevas de merluza y aliñas con la mahonesa. Puedes adornarlo con pan frito.

Ensalada de pollo y zanahoria. Una revisión low cost del clásico salpicón de marisco para llevar a la oficina o a la playa. Haces dos pechugas de pollo a la plancha, las deshaces en tiras y las colocas en un bol. Añades dos tomates en trozos muy pequeños, media lechuga, un aguacate y una cebolleta. Rallas una zanahoria. Mezclas y aliñas con dos cucharadas de zumo de limón, sal, pimienta y aceite de oliva virgen extra.

Ensalada murciana. El moje es su nombre. Cueces dos huevos, los enfrías y los pelamos. Cortas una cebolla en juliana fina. Cueces un minuto en una olla de agua hirviendo 500 gramos de tomates tipo pera con una cruz hecha en la base con un cuchillo. También puedes usar tomate al natural en conserva. Los enfrías, pelas y picas. En un bol, mezclas la cebolla con el tomate. Incorporas las aceitunas, el huevo cocido y atún. Una pizca de sal y un buen chorrito de aceite de oliva virgen extra.