«Al menos los agresores llegan hasta el juzgado», resaltan las familias de las víctimas de La Corredoria

Pilar Campo OVIEDO

OVIEDO

La Corredoria, inmediaciones de la estación
La Corredoria, inmediaciones de la estación

Aseguran que quieren que «paguen por lo que han hecho»

08 jul 2017 . Actualizado a las 09:11 h.

Aliviados por constatar los avances en la investigación policial, los familiares de las víctimas de las agresiones registradas, los pasados días 24 y 25 de junio, en La Corredoria intentan volver a retomar el pulso de su vida normal, mientras la maquinaria judicial empieza a ponerse en marcha. Casi simultáneamente a la detención y posterior puesta a disposición de la Fiscalía de Menores de un joven de 16 años como presunto autor de las lesiones ocasionadas a un menor, de 13 años, al que ocasionó «una luxación de la pirámide nasal» a causa de un fuerte puñetazo propinado sin mediar palabra, en plenas fiestas locales, comparecía ante el titular del juzgado de lo Penal número 4 de Oviedo Joaquín V.F., de 19 años, quien admitía ser uno de los miembros del grupo de 6 ó 7 adolescentes que, sin provocación previa alguna, infligía una brutal paliza a D.M. y O.V., para robarles.

Tenían el apodo y la filiación

El adolescente detenido como presunto autor de la agresión al menor de 13 años era puesto en libertad bajo la custodia de su madre, siguiendo el criterio de la Fiscalía de Menores, tras tomarle declaración. La Policía trabajaba sobre la identificación de este joven, de unos 16 años, y conocido por su «marcado carácter conflictivo». Fuentes cercanas al caso reconocen que, desde un principio, se dispuso de su descripción e incluso de su apodo, lo que facilitó que su detención fuera «cuestión de tiempo».

Los efectivos de la Brigada Provincial de Policía Judicial se hicieron cargo de la investigación y pusieron al joven a disposición de la Fiscalía de Menores, donde, asistido por un letrado, reconoció su participación en la agresión. Ese reconocimiento explícito devuelve la tranquilidad a la familia de la víctima que, según confirmó a La Voz de Asturias, se encuentra ya mejor de ánimo tras ver que estos hechos no quedarán impunes. «Al menos lo admitió», explicaron fuentes familiares. Mientras tanto, la víctima se recupera poco a poco en su domicilio de las lesiones sufridas.

Los detenidos, una pieza «clave» en la investigación

El mismo criterio de dejar en libertad bajo la custodia de sus padres es el que se adoptó con la menor que fue detenida por participar en una agresión en grupo contra los jóvenes D.M. y O.V. a los que agredieron con una gran violencia para conseguir su botín. Esta menor acompañó este pasado jueves a Joaquín V.F. a la sede de los juzgados donde declaró sobre los mismos hechos. Aunque afrontaba una petición fiscal inicial de cuatro años, la defensa de Joaquín V. llegó a un acuerdo con la Fiscalía para rebajar la condena a dos años de cárcel y una pena de cuatro meses de arresto, con  una multa de diez euros diarios, por su responsabilidad en sendos delitos de robo con intimidación y lesiones. Una condena que se ha suspendido a expensas de que cumpla su compromiso de afrontar el pago de la indemnización que le corresponda en ejecución de la sentencia una vez que las víctimas se recuperen totalmente de las lesiones y secuelas sufridas, tal y como adelantó La Voz de Asturias.

Su reconocimiento de los hechos y de la condena le reportará la existencia de antecedentes penales de los que carecía hasta ahora. Fuentes de la investigación consideran que tanto Joaquín V.F. como la menor que le acompañaba son «piezas claves» que han propiciado un gran avance en las pesquisas y se calcula que, en las próximas horas, podrían aumentar el número de personas identificadas en relación con esta causa.

«Que se haga justicia»

Las víctimas aún no se han recuperado completamente de las lesiones sufridas después de que los agresores les asaltaran, de forma sorpresiva, para robarles, empleando una gran violencia con golpes, patadas además de utilizar para este fin un palo, una navaja y un cinturón, sin dejarles a ellos opción alguna de defensa. El pasado jueves, las víctimas tuvieron que ver de nuevo la cara de dos de ellos en los pasillos del juzgado y, pese al trago que tuvieron que pasar, al igual que a la familia del menor agredido, les quedaba la tranquilidad de ver que, al menos, en el caso del adolescente Joaquín V., «acaba en el banquillo de los acusados y ya tiene antecedentes penales».

Fuentes familiares subrayan la importancia de que se haga «justicia» y que los agresores  «paguen por lo que han hecho» para que las víctimas de estas dos agresiones, con apenas 24 horas de diferencia, puedan  volver a retomar el pulso de su vida diaria «con normalidad».