Desentrañado el enigma de la muerte por doble atropello de una mujer en General Elorza

Juan M. Arribas

OVIEDO

Reconstrucción del accidente
Reconstrucción del accidente

El equipo de reconstrucción de accidentes de tráfico ha conseguido completar la secuencia

05 mar 2021 . Actualizado a las 16:56 h.

Falleció atropellada en plena calle General Elorza el pasado 5 de febrero. Era de noche, un día lluvioso, cuando una mujer de 78 años fallecía víctima de un doble atropello. La ausencia de testigos y la nula percepción de lo ocurrido por parte de los dos conductores implicados había convertido el siniestro en un accidente lleno de enigmas: no se sabía cuál de los dos coches había impactado primero o la trayectoria de la fallecida. Ahora, el equipo de investigación y reconstrucción de accidentes de tráfico (Eirat) ha conseguido desentrañar todas las claves: un coche impactó con la mujer y tras desplazarse a otro carril de la dirección opuesta fue arrollada por el otro vehículo.

La Policía Local de Oviedo ha completado las investigaciones con el Eirat. De los trabajos se ha informado al conductor de un Peugeot como investigado por un presunto delito de homicidio por imprudencia. El Juzgado de Instrucción Nº2 de Oviedo, determinará el alcance de las responsabilidades.

El atropello tuvo lugar el 5 de febrero y en el suceso se vieron involucrados dos vehículos, un Peugeot 807, conducido por J.M.G. de 58 años de edad, y un Citroen C4, conducido por M. B.P., de 32 años.

Si bien las primeras dotaciones que acudieron al lugar tenían claro que el suceso consistía en un doble atropello, no les fue fácil establecer la mecánica: no había testigos y la nula percepción de lo ocurrido por parte de los conductores implicados impedía conocer el lugar de impacto y el punto de contacto sobre la vía, así como la trayectoria del peatón.

El horario nocturno y la climatología adversa, con abundante lluvia, no ayudaban al esclarecimiento de lo ocurrido. Ante estas dificultades, la Jefatura de la Policía Local decidió activar el protocolo establecido para este tipo de casos. Y ahí entró en juego el Eirat.

En la mañana siguiente, los integrantes de este Grupo de Investigación, se presentaron en las instalaciones del Instituto de Medicina Legal de Asturias, en La Corredoria, acompañando a la médico forense en el examen externo del cadáver. En ese momento fue posible averiguar por la ubicación de las lesiones principales, así como por el lugar en que alojaban restos de vidrio, que la fallecida cruzaba la calzada partiendo de la acera de los números pares, es decir, lo hacía en dirección hacia el Centro Comercial Salesas.

Las labores de investigación para la recogida de toda la información posible continuaron con el minucioso análisis de los vehículos implicados, acotando principalmente los impactos en altura, con el fin de relacionarlos con la masa corporal y talla de la fallecida.

Tras ese punto entró en juego el software de reconstrucción de accidentes Pc-Crash, de gran precisión, pero difícil manejo. El programa informático permitió averiguar que el primero de los impactos recibidos por la mujer se lo habría provocado el Peugeot a una velocidad de 57 kilómetros por hora, cuando circulaba por el carril izquierdo de la calle del General Elorza, en sentido y dirección hacia la Plaza de Primo de Rivera, procedente de la Plaza de la Cruz Roja.

Posteriormente, la víctima habría experimentado una proyección aérea y tras su caída en el carril izquierdo de la misma calle, pero en sentido opuesto al de circulación del Peugeot, ser arrollada por el Citroen C4.